Pese a la incertidumbre de cómo se 'desescalará' el confinamiento en los próximos meses ante la evolución de la pandemia de Covid-19, el ayuntamiento ha tomado la decisión de cancelar las fiestas y actividades promovidas por las 21 juntas de distrito previstas entre los meses de mayo y octubre.
"No sabemos cómo se va a prolongar o cómo se va a dar continuidad al desescalamiento", ha apuntado la vicealcaldesa, Begoña Villacís, que confía en que "las fiestas volverán a Madrid, pero este año no va a ser posible".
El objetivo es evitar las previsibles aglomeraciones de este tipo de actividades que pueden facilitar el contagio del virus, tal como se está haciendo en otras ciudades tanto en España como en el resto de Europa.
Así, la delegada del área de Coordinación Territorial, Transparencia y Participación Ciudadana, Silvia Saavedra, dictará una instrucción en los próximos días para cancelar todos estos eventos, que en su mayoría no habían sido tramitados desde que se decretó el estado de alarma.
La decisión afecta tanto a las tradicionales fiestas de cada distrito, que empiezan habitualmente en mayo, con San Isidro, y se prolongan todo el verano, con San Juan, la Paloma, hasta la festividad de San Miguel o la Virgen de la Soledad, pero también todo tipo de actuaciones y actividades al aire libre o en recintos cerrados (salones de actos, auditorios, etc), y cualquier otra en la que no sea posible asegurar y controlar el acceso y las medidas de higiene, seguridad y distanciamiento social.
Entre las primeras en celebrarse, por ejemplo, las del 2 de Mayo en Malasaña, o las de Primavera en Hortaleza, que habitualmente comienzan el último fin de semana de mayo, para terminar con las Fiestas del Pilar en Fuencarral y el barrio de Salamanca, en octubre.
El Ayuntamiento estima que el crédito que se liberará de la suspensión de los programas de fiestas superará los 4,1 millones de euros, descontadas las indemnizaciones de artistas y feriantes contratados para las mismas, y este dinero se destinará preferiblemente a actuaciones en materia de servicios sociales y la dinamización de la actividad económica, en función de las necesidades de cada distrito.
El impacto socioeconómico de la pandemia del coronavirus en Madrid está siendo tal, que como ha señalado Villacís, en estos dos meses escasos se han concedido 33.514 ayudas alimentarias, cuando en todo 2019 el Ayuntamiento concedió 39.000. "En un mes casi lo que todo el año pasado", ha cifrado la vicealcaldesa.
Aunque las Fiestas de San Isidro que organiza el Consistorio ya se anunció que se suspendían la semana pasada, los Veranos de la Villa sí podrían celebrarse, aunque haciendo un esfuerzo de "imaginación" desde el área de Cultura que dirige Andrea Levy, para ofrecer una programación online o de otro tipo aún no desvelada.