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El lavado del cabello forma parte de nuestra rutina diaria de belleza y es muy importante hacerlo bien.
El lavado del cabello forma parte de nuestra rutina diaria y es muy importante hacerlo bien. La importancia del cepillado previo, cuántos champús son necesarios, la temperatura del agua… El equipo artístico de Llongueras resuelve las dudas más habituales.
¿Cómo debo lavarme el pelo en casa? Puede que ésta sea una de las preguntas que más veces le habremos hecho a nuestro peluquero. Eso sí, pese a decirnos todos y cada uno de los pasos, es probable que alguno se nos olvide. Por ello, el
equipo artístico de Llongueras facilita el
paso a paso completo para lucir un pelo hidratado, sano, brillante y limpio durante más tiempo.1. CEPILLADO PREVIO. Antes de humedecer el cabello, cepíllalo y desenrédalo en seco. Esto estimulará la circulación sanguínea del cuero cabelludo y facilitará la posterior penetración del champú. Comienza el cepillado por las puntas, para terminar en la zona de la raíz, nunca al revés. Para desenredar el cabello, el equipo ertístico de Llongueras recomienda utilizar un
cepillo de cerda natural o uno de fibra de carbono.2. AGUA TIBIA. Humedece el cabello durante unos minutos con agua tibia.
3. PRIMER CHAMPÚ. Comienza con un primer lavado. Para esto utiliza un champú específico según las características de tu cabello. La forma en la que te lo apliques será clave para conseguir un buen resultado.
Empieza repartiendo el producto por la zona de la raíz y continúa frotando por la zona de la nuca, la coronilla y, finalmente, pero no menos importante, detrás de las orejas. Una vez finalizado el primer enjabonado, aclara el cabello con agua caliente.
4. SEGUNDO CHAMPÚ. Continúa con un segundo lavado. En esta ocasión, trabajaremos de una manera más superficial la zona de las raíces y nos centraremos en los medios y puntas.
Evita frotar el cabello, para que éste no se te enrede, e intenta trabajar con los dedos lavando de forma vertical. Una vez terminado el enjabonado, deja actuar el champú dos minutos.
5. UN GOLPE DE AGUA FRÍA. Aclara el cabello con
abundante agua tibia y
termina con un golpe de agua fría. Esto sellará las cutículas y evitará que el cuero cabelludo se engrase.
6. ACONDICIONADOR O MASCARILLA. Aquí la gran duda. Si tu cabello necesita hidratación, utiliza acondicionador, pero si tu pelo necesita nutrición, utiliza mascarilla.
Acondicionador: aplícalo
de medios a puntas y después desenreda el cabello. Déjalo actuar unos minutos y aclárate el pelo, pero sin desenredar de nuevo.
Mascarilla: aplícala por mechones, de medios a puntas, mientras desenredas el cabello al mismo tiempo. Hazte
un moño alto y déjala actuar, mínimo 30 minutos, posteriormente aclara el cabello.
7. ADIÓS HUMEDAD. Quita la humedad del cabello con ayuda de una toalla, mucho mejor si ésta es de microfibra, pero
sin frotarlo ni retorcerlo. Importante: no dejes mucho rato el cabello envuelto en la toalla, harás que tu cabello sufra. Finalmente,
cepíllalo y déjalo secar al aire.¿Estás preparada para lucir el pelo que siempre has soñado? ¡Toma nota y no te saltes ninguno de los pasos!
El resultado será de diez.