Así lo ha hecho saber la organización en un documento, en el que también habla de control de acceso, limitación de aforo y "medidas extremas de distanciamiento social". En el caso de la desinfección de casetas y pabellones, remarca que se produciría dos veces cada día.
Tal y como detallan los organizadores, este tipo de protocolos de seguridad posiblemente llevarán a un rediseño de los espacios de la feria. La premisa con la que trabajan los organizadores es la de alcanzar "una seguridad extrema" para todos los participantes, si bien añaden que existe "el riesgo obvio" de la cancelación definitiva de "todo tipo de espectáculos masivos de público".
"Tendremos feria si contamos con la autorización plena de la autoridad sanitaria estatal, local y comunitaria. Nunca será una decisión unilateral de la feria", han aclarado, añadiendo, además, que se está a la espera de recibir las "indicaciones pertinentes" tanto del Ayuntamiento como de la Comunidad de Madrid.
Es por ello que también se habla de "otro escenario" posible, el de la cancelación por parte de las autoridades. En ese caso, desde la Feria del Libro de Madrid se intentará el desarrollo en esas fechas de una 'Feria virtual', a través de un proyecto "puntero tecnológicamente" que incorporará la venta al proceso.
Por su parte, el área de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid ha reiterado su compromiso con la celebración de la Feria del Libro, y será "escrupuloso" con el cumplimiento del protocolo sanitario contra el Covid-19 que se establezca por Sanidad en el mes de octubre, fecha prevista para su celebración. El Consistorio ha señalado que "respetará" y "cumplirá siempre" las indicaciones que se den en el momento que corresponda para que ésta se pueda producir, garantizando la seguridad tanto de los libreros como de los visitantes.
"La feria está ahora mismo planteada paraoctubre y apenas sabemos qué pasará de aquí a unos días, en cuanto a las medidas sanitarias, por lo que estamos atentos a las últimas indicaciones que se den", han manifestado fuentes del área.
Así, el Ayuntamiento "será completamente escrupuloso con el cumplimiento de los protocolos sanitarios relativos a la posible distancia social, control de aforos o medidas de higiene vigentes en el momento de la celebración de la feria".
Reiteran también que "el compromiso con el castigado sector de los libreros es indudable", por lo que el Ayuntamiento se mantiene abierto "a las sugerencias y demandas que el sector le plantee en estos duros momentos".
Recientemente, el Ayuntamiento de Madrid ha declarado a este evento 'Bien de interés general de la ciudad'. "La Feria de octubre es una incógnita, no por los condicionantes meteorológicos, sino por los protocolos sociosanitarios que se deben implementar y se cumplirán rigurosamente", han reconocido.