En 1999, Estopa hizo historia al vender más de millón y medio de copias de su primer álbum. En los veinte años que han transcurrido desde entonces, David y Jose Muñoz han revolucionado el panorama musical español y latinoamericano, cosechando éxito tras éxito con cada nuevo disco.
A través de las numerosas conversaciones y entrevistas con el periodista y crítico musical Jordi Bianciotto, los hermanos Muñoz hacen un completo repaso de su trayectoria profesional, desde sus primeras actuaciones improvisadas en la calle hasta los megaconciertos en los principales escenarios.
Y al rememorar sus comienzos, las dificultades que tuvieron que superar, sus recuerdos más entrañables o las anécdotas más curiosas, van construyendo un autorretrato a pinceladas que muestra el lado más íntimo, y también menos conocido, no de Estopa, sino de David y Jose, dos hermanos «de barrio», que comparten una misma pasión: la música.
"Lo hacemos por salud mental. Nos ha pasado algunas veces de ir a un sitio y sentirte el outsider, así que buscas a otro y te sientas con él, haciendo migas", ha contado José Muñoz, después de recordar algunos momentos donde se sentían fuera de lugar, como una fiesta del F.C. Barcelona -aunque ambos se reconocen seguidores del club catalán- o un evento en el que estaban miembros de U2 -y no los reconocieron-.
"Hay gente que se sorprende de que vayamos así, con estas ropas, pero yo me las pongo con muy buena sensación", ha comentado con humor David, para luego bromear con el hecho de que solo se hayan puesto corbatas "para ir a las bodas".
"Son lo que yo pensaba que eran. Me sorprende que gente con su proyección lleven la vida que llevan, tan normal. Ellos dicen que no a invitaciones que les hacen para ser VIP y no es por cuestión de resistencia", señala Bianciotto.
David reconoce que el grupo ha desarrollado, a lo largo de estos años, preferencia por las "historias de los fracasados" y que las historias de los ganadores "dan asquete". "No nos creemos todas estas cosas que acaban con la rubia y todo bien. En las películas los pistoleros no siempre eran buenos", ha añadido José.
De hecho, la editorial sugirió titular estas memorias 'Partiendo la pana', algo que rechazaron porque lo veían "demasiado triunfador". "Somos ganadores, pero circunstanciales y de chorra. No sé yo si ser un ganador te puede servir para mucho, pero hemos tenido la suerte de encontrar un camino a seguir y nos han seguido", ha indicado David.
Con un pasado laboral en una fabrica de Seat -tal y como han reflejado en varias canciones-, Estopa siempre ha sido combativo respecto a los derechos de los trabajadores. De hecho, la semana pasada salieron en apoyo de los trabajadores de Nissan que iban a perder su empleo en Barcelona por el cierre de las plantas, por lo que recibieron alguna crítica.
"A mí no me sorprende, sabía que habría gente que se iba a poner en la piel de los dirigentes japoneses, pero afortunadamente, son gente rara. Es como si ves una película de Supermán y vas con Lex Luthor", ha dicho David Muñoz. "Hemos vivido eso y sabemos perfectamente por lo que están pasando, y se trata de ponerse en su piel", ha apostillado José.
En cualquier caso, consideran que la historia de Estopa "es muy común" a la de muchas otras personas de España, porque "hay muchas Cornellás y eso hace que se sienten identificados. Existe Vallecas, Hospitalet o Badalona, con inmigrantes nacido en otras ciudades y ese es el código que nos une: el de la inmigración", ha apuntado José.
Echando un vistazo atrás a sus más de la decena de álbumes editados, los hermanos aseguran que no cambiarían ninguna de sus letras, a pesar de que sí creen que hay un aumento de corrección política. "Las canciones están ahí y nadie nos ha denunciado nunca. Igual al recuperarlas para un nuevo disco recopilatorio podría ser un ejercicio interesante, pero yo creo que no pasaría nada", explica David.
Tampoco se les ha "pasado por la cabeza" el separarse e iniciar una carrera en solitario en todo este tiempo. "No ceo que eso pase. Cuando colgamos con la promoción dentro de un rato nos vamos a volver a llamar. Tenemos un pique eterno con la consola y no es que ya no conciba la carrera sin José, sino la vida", afirma David.
"Si mi hermano me dijera que va a hacer un grupo por separado, no me sabría mi parte", indica por su lado José. Por el momento, miran al horizonte con una gira que se ha tenido que suspender este año por el coronavirus -"no hemos sido nada creativos durante el confinamiento", admiten- y que retomarán en Granada, el 27 de abril de 2021.