Las pruebas para implantar este método de pago se desarrollaron entre enero y marzo de este año en la línea 122 de la EMT (Avda de América-Feria de Madrid) y la validez del resultado ha permitido extenderlo ahora al resto de la flota.
El concejal del área de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha sido el responsable de la presentación de este método de pago para los billetes sencillos esta mañana, en una de las paradas de la EMT en Atocha.
Al subir al autobús, el viajero puede, utilizando la cámara de su teléfono móvil, escanear el código QR que muestra la validadora de billetes que llevan todos los autobuses. Para ello deberá tener instalado en su móvil una aplicación de movilidad, Imbric, que permite que la EMT no tenga que instalar nuevo hardware en sus autobuses, sino que se desarrollla a través de firmware y software en sus servidores.
El viajero recibe, al realizar la transacción, un justificante, y el conductor del autobús un mensaje en tiempo real que confirma el localizador del billete y el comercializador que lo ha adquirido. Los inspectores de la EMT también pueden verificar el abono del billete mediante un código QR.
El proyecto se ha desarrollado en colaboración público-privada con la firma Eysa, gestora de la aplicación Imbric, que integra servicios de movilidad para empresas y particulares. Precisamente, el piloto se realizó con la colaboración de empleados del grupo Eysa que participaron activamente durante la fase de pruebas y validación en la línea 122.
La EMT se convierte en el primer servicio de transporte público que implanta este sistema en España, a través de una aplicación que además permitirá incorporar otros servicios de movilidad digitales, e incluso planes para empresas, de manera que se favorezcan los desplazamientos habituales de sus empleados en transporte público.