El Ayuntamiento de Madrid ha asegurado que la tala de 90 árboles en Los Paúles ocurrida en el mes de febrero fue autorizada al tratarse de ejemplares “secos, enfermos o envejecidos”, de imposible trasplante. La licencia de obras para construir un gimnasio, proyecto que rechazan los vecinos del casco histórico de Hortaleza, sigue pendiente de la autorización de la Dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid.
Esta información se produce después de que en el Pleno de la Junta de Hortaleza se rechazara una proposición del PSOE para paralizar cualquier actuación en el entorno, mientras la Dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid emita su informe sobre los edificios que pretenden ser demolidos. Se trata de edificaciones con 150 años de antigüedad que rodean y conforman la antigua plaza del pueblo de Hortaleza y su iglesia, San Matías, neomudéjar. Bajo su subsuelo se encuentran, además, las bodegas del pueblo.
De momento, informa Europa Press, fuentes municipales han señalado que se está a la espera de la autorización de la Dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid, que tiene que emitir este informe de patrimonio histórico tras la realización de estudios arqueológicos.
A día de hoy "no ha tenido entrada en el registro de la Agencia de Actividades solicitud de licencia de obras o presentación de Declaración Responsable por parte de Ingesport para la realización de obras", han destacado las mismas fuentes municipales.
Con independencia de las obras, prosiguen, la empresa Ingesport solicitó al distrito de Hortaleza la tala de árboles en la parcela, autorizada tras el informe del área de Medio Ambiente.
"La mayoría de los casi 90 ejemplares estaban secos, enfermos o envejecidos y por eso se autorizó su tala el pasado año. La empresa se comprometió a reponer 264 ejemplares de frondosas y 681 ejemplares de coníferas en compensación por las unidades inviables de trasplante. El promotor entregó los árboles de reposición a los viveros municipales el 3 de diciembre del año pasado", han indicado.
Los vecinos, que formaron una Plataforma en Defensa del Casco Antiguo de Hortaleza, con el apoyo de Madrid Ciudadanía y Patrimonio, vienen reivindicando la paralización de estas obras para levantar un gimnasio con un aparcamiento de 300 plazas desde que conocieron el Plan Especial aprobado por el Ayuntamiento en 2015. Este trámite eliminaba la protección de los edificios de los Paúles afectados por el proyecto.