"Traer los residuos del este a Valdemingómez evidencia la dejadez de funciones de la Comunidad, que ha sido incapaz de poner en marcha a tiempo una planta de tratamiento en Loeches. Ahora esta basura la tiene que asumir el Parque Tecnológico de Valdemingómez, poniendo en peligro los avances conseguidos en gestión de residuos en Madrid”. Así explicaba la concejala de Más Madrid Esther Gómez los motivos que han llevado a la formación a impugnar ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) el convenio de colaboración suscrito por el Ayuntamiento con la Mancomunidad del Este y la Comunidad de Madrid.
Un acuerdo que -recuerda Gómez- supone depositar en Valdemingómez más de 230.000 toneladas de basura al año desde los municipios del este. El convenio fue publicado el 19 de marzo de este año, en pleno estado de alarma, y pretende dar cobertura a estos residuos, que se están depositando en Valdemingómez desde finales de 2019. Al TSJM han acudido, además de la edil de Más Madrid, los concejales José Luis Nieto y Paco Pérez.
Más Madrid ha recurrido dicho convenio con el apoyo de un dictamen pericial por entender que el convenio es fraudulento al no responder a una auténtica colaboración entre Administraciones y “no beneficia por igual a todas las partes, sino al contrario, la capital es la más perjudicada, sobre todo Vallecas”.
El pasado 10 de enero, el grupo municipal pidió un Pleno extraordinario en Cibeles para tratar la situación de Valdemingómez, que rechazó por tercera vez la llegada de los residuos de la mancomunidad a esta planta con los votos de Más Madrid, PSOE y Cs. Sin embargo, en diciembre pasado el Gobierno municipal decidió aceptar que las 230.000 toneladas anuales de residuos de los municipios de la Mancomunidad del Este fuesen tratadas en el Parque Tecnológico de Valdemingómez.
Para el grupo municipal, Madrid debe avanzar hacia la reducción de los vertidos y el fin de la incineración. Y asumir residuos ajenos solo conlleva un retroceso en términos de economía circular, además de un aumento del impacto de la planta en Valdemingómez, con más olores y emisiones contaminantes. Más Madrid ha recurrido el convenio al considerar que no hay un interés en ambas partes y que Madrid, sobre todo los distritos de Vallecas, salen perjudicados.
En este sentido, el concejal Paco Pérez ha apuntado que este recurso “responde a nuestra oposición a que Vallecas se convierta en el vertedero de Madrid. En el último Pleno del Ayuntamiento preguntamos por el nuevo contrato para la gestión de la incineradora vencido el pasado mes de junio y no obtuvimos respuesta. Vamos a trabajar porque se respeten los planes de cierre en 2025, que PP y Cs ponen en cuestión con las políticas que están adoptando”.
Pérez ha subrayado que “Valdemingómez no puede convertirse en el vertedero de reserva de todo Madrid y los vecinos de Vallecas estamos haciendo una aportación muy importante de solidaridad soportando cargas que nadie quiere”. Más Madrid pretende con este recurso que no se perpetúe el vertido en el tiempo y que, cuanto antes, empiecen a depositarse en el vertedero de Loeches, que ya está habilitado para ello.
A juicio de Más Madrid, la Comunidad ha hecho una clara dejación de sus funciones y, en un intento de eludir la responsabilidad que tiene en este asunto, utiliza este cauce para dar cobertura a su falta de previsión respecto al vertedero de Alcalá de Henares y a la solución a los residuos de 29 municipios de su territorio. “La ciudad de Madrid en nada se beneficia de este convenio, es más, sufrirá perjuicios y consecuencias negativas, tanto en la planta del parque tecnológico de Valdemingómez como en la salubridad de los barrios colindantes”, ha insistido Esther Gómez.
Más Madrid continúa así su lucha contra lo que considera un atropello a los vecinos y vecinas de Vallecas y a la ciudadanía madrileña en general, tras el recurso presentado con anterioridad por la autorización para el traslado de los residuos del este a Valdemingómez antes de la firma del convenio y que sigue tramitándose en la actualidad por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 31 de la capital.
Por su parte, el concejal José Luis Nieto ha constatado que ya se ha producido un incremento de olores y ha recordado que se produjo un incendio en el vertedero de Las Dehesas a finales de junio: “Hemos comprobado cómo se está saturando más rápido y que el vaso ha reducido su vida útil en unos seis meses, entre los residuos del este y los biosanitarios tipo 2 no peligrosos”.
Las 230.000 toneladas anuales implica un incremento superior al 20 % anual del volumen de residuos que llegan a este espacio, con los consiguientes problemas que ocasionarán para su adecuada gestión. Asimismo, este traslado pone en serio peligro el cumplimiento de la Estrategia de Prevención y Residuos de la Ciudad de Madrid 2018-2022 que el anterior gobierno puso en marcha y que estaba consensuada con los colectivos vecinales y ecologistas y que preveía la modernización de la planta, la reducción de los residuos tratados y el cierre de la incineradora en 2025.