El de Belfast, que ha asegurado que tiene “muchas ganas de volver a actuar en directo”, se encontrará con aforo reducido, mascarilla, control de temperatura y renovación del aire del recinto cada ocho minutos, entre otros protocolos de seguridad para el público que aplica el WiZink Center.
Las entradas ya están a la venta, desde 56 euros hasta 140 en la web del palacio de conciertos.