Así lo ha sostenido Murgui, tras indicar que el edificio está terminado, a falta de completar el equipamiento técnico de la sala principal. Pilar Perea ha reclamado, por su parte, que el edificio "se abra de inmediato al público, para que pueda usarse mientras se acaba de comprar el material técnico".
El grupo municipal ha señalado que las obras en la Nave estaban presuntamente terminadas, pero el Gobierno municipal "ha esgrimido que sigue cerrada porque aún hay algunas obras pendientes en el equipamiento de la sala de teatro y reparaciones en la cubierta".
"Exigimos que el Ayuntamiento aclare cuándo tiene previsto abrir La Nave, tal y como aprobó el pleno del distrito el mes pasado. Sospechamos que las obras se están dilatando de manera artificial", ha insistido Murgui.
La Nave Daoíz y Velarde forma parte de las instalaciones de los cuarteles de artillería de la Maestranza. En los años 80, los terrenos pasaron a propiedad municipal y, una década después, gracias a las movilizaciones vecinales, se inició el proyecto actual, que consta de un polideportivo, equipamientos culturales, educativos, zonas verdes y espacio público.
En 2014, durante el mandato de Ana Botella, se invirtieron 13 millones de euros en su rehabilitación, pero el edificio ha permanecido cerrado durante casi una década. Las obras se presupuestaron en 12 millones de euros en diciembre de 2006 y el plazo de ejecución se fijó en 25 meses. Siete años después, el recinto no solo está cerrado al público sino que el escenario principal y las butacas no se han llegado a colocar, indican en Más Madrid.
Fue en septiembre de 2015, a los pocos meses de llegar al Gobierno, cuando el anterior Ejecutivo abrió al público la Nave Daoíz y Velarde con el compromiso de finalizar el proyecto que se encontró sin terminar, a excepción de los espacios comunes y las salas de ensayo. La Junta de Retiro comenzó a redactar el proyecto de actividad y programación, incluyendo la cesión de espacios a compañías, propuestas vecinales y asociaciones culturales del entorno.