El alcalde, José Luis Martínez-Almeida; la vicealcaldesa, Begoña Villacís, y la delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, realizarán desde la Galería de Cristal del Palacio de Cibeles, a las 19.30 horas, la tradicional cuenta atrás para inaugurar de forma oficial la Navidad en Madrid.
El Consistorio mantendrá la misma inversión que el año pasado, en torno a 3,2 millones de euros (el año pasado fueron 3,08 millones y este 3,17 millones). La intención inicial pasaba por incrementar la partida para tal fin, ya que "la iluminación navideña supone una importante contribución al impulso turístico y comercial de la ciudad". Sin embargo, la crisis provocada por la Covid-19 "ha trastocado" los planes y las prioridades, por lo que el presupuesto se mantendrá en el entorno del año pasado.
No obstante, la lista de emplazamientos incluye más de 30 nuevas ubicaciones respecto al año pasado. En total, habrá más de 210 calles iluminadas, repartidas por los 21 distritos de la capital.
Entre los nuevos espacios, destacan la calle de Alcalá entre Sevilla y Sol; el eje Duque de Medinaceli-Jesús; las plazas Elíptica, de las Salesas, del Encuentro y de Oporto; los desarrollos de Sanchinarro y las Tablas; el mercado de Usera; o el entorno del recién desmontado puente de Joaquín Costa-Francisco-Silvela.
El proyecto de iluminación navideña cuenta, una vez más, con propuestas de arquitectos, diseñadores y especialistas en este tipo de instalaciones, como Ben Busche, Teresa Sapey o Sergio Sebastián.
Además, como novedad, este año se incorporarán propuestas de diseñadores de moda, gracias al convenio firmado entre el Ayuntamiento y la Asociación de Creadores de Moda de España (ACME). En este sentido, el alumbrado contará con diseños de Devota & Lomba, Juan Duyos y Andrés Sardá.
Además de los arcos, cadenetas, abetos o almendros, la iluminación mantendrá los motivos tradicionalmente navideños de belenes figurativos, que ya se incorporaron el año pasado en la Plaza Mayor y en las puertas de Alcalá, Toledo y San Vicente.
También se mantendrá la gran bola luminosa de 'video mapping' en la confluencia de las calles Alcalá y Gran Vía, para la que se desarrollará un nuevo espectáculo visual. A diferencia del año pasado, la animación será continuada, la música sonará de fondo y con un volumen considerablemente inferior y no habrá pases a unas horas determinadas, para evitar aglomeraciones.
La iluminación navideña incorpora además este año los colores de la bandera de España en el eje Prado-Recoletos (entre Colón y Neptuno), en los puentes de Juan Bravo y de Raimundo Fernández Villaverde y en los aledaños del Centro Cultural Fernán Gómez.
El 100% del alumbrado navideño, que comenzó a instalarse a principios del mes de septiembre, estará compuesto por bombillas de tecnología 'led', lo que supone un mínimo consumo energético, así como un menor impacto ambiental.
Se trata de una estructura de aluminio de 10 metros de altura, 7,5 metros de anchura y 5 metros de fondo, sobre la que se instalará un entramado luminoso formado por 37.720 lámparas led para dar forma al diseño. Las tonalidades serán blanco frío y caliente.
Además, la figura se decora con lentejuelas y bolas de color plata, acompañadas de diamantes de plástico translúcido. La potencia es únicamente de 7.100 W, equivalente a 3 secadores de pelo. El peso de la estructura es de 1,3 toneladas.