El comité organizador de ARCO, la feria de arte contemporáneo de Madrid, se da de plazo hasta abril para valorar si se dan las condiciones para su celebración o si se ve obligada a cancelar su celebración este año y se pospone a 2022.
La feria debería de haberse celebrado a finales de este mes, pero se pospuso a julio (7 al 11) para tratar de asegurar la presencia internacional por la pandemia.
Su directora, Maribel López, estima que, si en abril no se da una serie de condiciones, lo adecuado no será volver a poner otra fecha este año, sino celebrarla ya en 2022, según ha avanzado durante la presentación de la exposición 'Recorridos fotográficos'.
La cancelación de ARCO este año sería especialmente amarga, porque celebraría su cuarenta aniversario. El año pasado se pudo celebrar in extremis, dos semanas antes del confinamiento, aunque la afluencia de público bajó por el coronavirus. En cuanto a ARCO Lisboa, la versión portuguesa de la feria, que está prevista que se celebre en mayo, se decidirá este mes.
“Nos estamos tomando un plazo, no queremos precipitar nada, somos muy ágiles y estamos esperando a ver si mejora la situación”, ha avanzado hoy la directora de la feria, Maribel López, sobre la cita madrileña. La semana pasada, Navarra anunció la cancelación de los San Fermines, un evento que se celebra en las mismas fechas que tiene planteada ARCO, pero la feria prefiere esperar y ver si, entre otras cuestiones, la vacunación mejora la situación. “No estamos acostumbrados a tener tan pocas certezas, pero es lo que toca -ha aseverado-. No debemos tener miedo a improvisar lo que podamos”.
La selección de galerías que participarán en ARCO ya está lista y todas, menos una, han aceptado el cambio de fechas a julio. “Hay muchas formas de celebrar una feria”, ha señalado López, que se ha mostrado dispuesta a reducir espacio o aforos, aunque cree que una de las condiciones que se tienen que dar sí o sí, es que puedan viajar los coleccionistas europeos.
En caso de que se cancele, la organización trabaja ya en una plataforma digital que presentará en marzo, aunque todavía no está definido qué formato adoptará. El objetivo no será tanto sustituir la feria -una experiencia por la que han optado otras citas internacionales, sin mucho éxito comercial-, como el “generar un espacio de creación para difundir el trabajo de las galerías”.
Para conmemorar que este mes se hubiera celebrado ARCO, la feria ha organizado una muestra en el Museo Municipal de Arte Contemporáneo de Madrid con imágenes seleccionadas de Recorridos fotográficos, su colección de fotografía. “No queríamos que febrero pasara sin estar presentes. ARCO es parte de la historia de Madrid”, ha dicho López.
El proyecto se llevó a cabo durante dos décadas, entre 1988 hasta 2010, y consistía en encargar a fotógrafos de renombre un trabajo documental y libre sobre la feria. Entre las estampas que se pueden ver, se encuentran imágenes de gente abarrotando pasillos, artistas haciendo 'performance' o personalidades de la época visitando la feria.
Los firmantes son grandes fotógrafos nacionales, como Cristina García Rodero, Alberto García-Alix, Miguel Trillo, e internacionales, como Bernard Plossu o Bruce Gilden. La muestra estará abierta hasta el 4 de abril.