Miles de aficionados de todo el mundo viajan cada año a España para disfrutar del turismo del vino. Turistas que viajan específicamente con la intención de visitar las bodegas españolas y los viñedos, para conocer los procesos de elaboración del vino en nuestro país. Y es aquí, precisamente, donde se enmarcan las rutas del vino.
El turismo enológico en España cuenta con una gran variedad de rutas del vino más que interesantes. Un recorrido a lo largo y ancho de nuestro país, para conocer las bodegas y los procesos de elaboración de algunos de los vinos españoles más aclamados y populares. Aquí recogemos las rutas de turismo del vino más reconocidas.
La Ruta del Vino de La Rioja Alavesa está delimitada por el río Ebro y la Sierra de Cantabria. La conforman 15 municipios vascos, que albergan numerosas bodegas y paisajes de viñedos. El más importante de todos ellos es Laguardia, considerada la capital de la Rioja Alavesa. Una villa medieval fundada en el siglo X.
Las bodegas que se sitúan a lo largo de esta ruta son de arquitectura tradicional o modernista. Una de las más impresionantes es la Bodega Ysios en Laguardia, cuyo edificio fue diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava. A unos kilómetros de Laguardia se halla Samaniego, que alberga la famosa Bodega Baigorri.
La Ruta del Vino de Rioja Alta ofrece no solo la posibilidad de visitar una gran cantidad de bodegas. También se podrá conocer el famoso Museo Vivanco de la Cultura del Vino, uno de los museos enológicos más importantes del mundo. La capital de la Rioja Alta es Haro, un lugar de referencia y cuyas bodegas son de finales del siglo XIX.
El paisaje que circunda los viñedos lo conforman las sierras de Toloño, Cantabria y la Demanda. Aquí se pueden visitar decenas de bodegas centenarias, museos, centros de interpretación y diversas localidades. La mayoría de hoteles y casas rurales de esta zona están especialmente pensados para los seguidores del turismo enológico.
La Ruta del Vino de las Rías Baixas es la opción ideal para los que deseen conocer el albariño. El vino gallego por antonomasia y que se elabora fundamentalmente en zonas como O Grove, Sanxenxo, Cambados, Vilagarcía de Arousa, Vilanova de Arousa, Meaño, Ribadumia y Meis.
Además de bodegas y centros de interpretación del vino, la Ruta del Vino de las Rías Baixas ofrece un recorrido muy completo para el turista. Lugares como Cambados o Vilagarcía de Arousa ofrecen un interesante legado patrimonial. O Grove y Sanxenxo son magníficos destinos de playa. Además, la Fiesta del Albariño en Cambados o la Fiesta del Marisco en O Grove son de visita obligada.
Tomelloso, Alcázar de San Juan, Socuéllamos, Villarrobledo, El Toboso y Campo de Criptana son los municipios que conforman la Ruta del Vino de la Mancha. Un recorrido que atraviesa las provincias de Albacete, Ciudad Real y Toledo y que te llevará a conocer las bodegas y viñedos más tradicionales de la zona de la Mancha.
Pueblos con encanto llenos de historia, arte y cultura. La figura de Don Quijote, por ejemplo, sale a relucir en la mayoría de estos lugares. En Socuéllamos tendrás la oportunidad de visitar el Museo Torre del Vino. Ya en Villarrobledo, podrás conocer la tradición de las tinajas de barro cocido, que data del siglo XVIII.
La Ruta del Vino Ribera del Guadiana está formada por más de veinte municipios de la provincia de Badajoz. Una ruta en la que se pueden visitar bodegas, realizar catas y conocer el famoso Museo de las Ciencias del Vino en Almendralejo. Una magnífica oportunidad para conocer la gastronomía y la cultura de la provincia pacense.
Para complementar esta ruta, se puede recorrer la Sierra Grande Hornachos y los humedales de la Albuera. Una zona ideal para programar todo tipo de actividades al aire libre. La Fiesta de la Vendimia en Villafranca de los Barros es el evento exclusivo en el que participar a lo largo de esta ruta.
Por último, nada mejor que realizar la Ruta del Vino de Toro. La comarca de la Denominación de Origen del Vino de Toro está compuesta por 17 municipios, todos ellos situados entre el sureste de la provincia de Zamora y el suroeste de la provincia de Valladolid. Un extenso paisaje de viñedos atravesado por el tranquilo discurrir del río Duero.
Todas estas rutas del vino conforman un variado turismo enológico que se puede realizar en nuestro país. Una oferta turística ideal para los amantes de este líquido elemento.