Estas medidas, que se estructuran en 10 líneas de actuación, constituyen un catálogo de actuaciones de alto impacto en ámbitos estratégicos, alineadas con las 10 políticas palanca del Plan Nacional.
Según ha detallado el concejal delegado de Internacionalización, Santiago Saura, dentro de este proyecto, hay 12 que son "proyectos tractores" por su "carácter estratégico", como puede ser el Bosque Metropolitano. La concesión de ayudas, ha apuntado, será "un proceso largo".
Villacís ha dicho de él que es "un plan con vocación de permanencia". "Este tren pasa una vez y no podemos dejarlo pasar. Es imprescindible que el Gobierno de España sea sensible al municipalismo", ha apuntado a continuación.
Por su parte, el primer edil matritense ha puesto en valor que "Madrid es el futuro y el mejor futuro", ya que por la capital "pasa el futuro y la recuperación". "Somos el motor económico y Madrid puede tirar de España. Crecemos diez veces por encima de la media nacional", ha destacado.
Sobre el guion que se ha seguido para la elaboración de este plan, Almeida ha explicado que ha habido contactos con determinados Ministerios, para pedir orientación, como con el de Agenda Urbana y el de Transición Ecológica.
Estos 105 proyectos, ha remarcado Almeida, se van "a seguir haciendo, al margen de que lleguen o no los fondos europeos".
En el apartado de renaturalización de la ciudad, aumentará la cantidad y conexión de zonas verdes urbanas haciendo un "Madrid natural". Otra de las intenciones es poner en marcha un Plan de impulso de la economía circular y potenciará la Estrategia de transformación de residuos.
En lo que concierne a la energía eficiente y renovable, el Gobierno municipal busca mejorar la eficiencia energética del parque edificado y de la prestación de servicios municipales e incrementará la Generación renovable y distribuida.
Además, quieren posicionar a Madrid como una ciudad con las mejores infraestructuras digitales, con capacidades digitales inclusivas, orientada a servicios públicos electrónicos de ayuntamiento y sociedad y dirigida por datos de forma ética, inteligente y segura.
El proyecto contempla fomentar la Movilidad de bajas emisiones y la adaptación progresiva de infraestructuras para la movilidad sostenible y conectada así como promover la atracción y mejora de talento y capacidades, combinando el impulso a sectores con proyección con la modernización del tejido productivo y el apoyo a pymes.
Se fortalecerá la cohesión social y la reducción de las brechas de género y facilitará el equilibrio territorial y el acceso a la vivienda en la ciudad. Además, se llevará a cabo la rehabilitación urbana de barrios y zonas degradadas o envejecidas, incorporando criterios de sostenibilidad, procurando la recuperación de espacios urbanos y edificios.
Esta estrategia persigue "hacer de Madrid la mejor ciudad para vivir y trabajar en 2030", en el marco de los cambios y transformaciones asociadas con el compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, reflejado en la reciente aprobación de la Estrategia de localización de los ODS en la Ciudad de Madrid.
La estrategia se ha desarrollado, desde su inicio, de forma coordinada con el Programa Operativo de Gobierno 2019-2023 y los Acuerdos de la Villa, cuyo objetivo es avanzar en la protección social de las personas más vulnerables, que han sufrido con especial intensidad el impacto de la crisis causada por la pandemia, así como recuperar y estimular la actividad económica en la ciudad.
El Gobierno municipal alega una "intensa pérdida de actividad económica mundial y un fuerte impacto social, sin que se pueda contar todavía con un horizonte claro sobre su evolución".
En la ciudad de Madrid, la actividad económica sufrió un fuerte retroceso en 2020, del 9,6%, interrumpiendo su potente crecimiento del 3,6% en 2019 mientras que la tasa de paro alcanzó los 14,03 puntos porcentuales, un incremento de 3,83 puntos con respecto al año anterior. Este desplome en la actividad económica ha provocado que el 37% de los hogares madrileños hayan visto reducidos sus ingresos en alguna medida.
Para amortiguar el impacto de esta situación, la Unión Europea ha acordado un Plan de Recuperación dotado con 750.000 millones de euros, que facilitará a los Estados Miembros "iniciar el camino hacia la salida de la crisis y sentará las bases para una Europa moderna y más sostenible".
El Mecanismo se articulará a través de Planes Nacionales en cada Estado Miembro que, en conjunto, impulsarán la inversión y la demanda de bienes y servicios en el mercado interior, a la vez que acelerarán la transición ecológica y digital y velarán por garantizar la cohesión social.
En el caso de España, el Plan Nacional de Recuperación, Transformación y Resiliencia (España Puede) fue aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 27 de abril de 2021, iniciando con ello su tramitación formal en el ámbito europeo.
Este plan establece las directrices que guiarán la primera fase de movilización de los casi 70.000 millones de euros de transferencias del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia europeo que corresponden a España.