Según ha informado una portavoz de Emergencias Madrid, los Bomberos ha desaguado y asegurado la zona, además de retirar varios árboles que se habían descalzado. Además, ha informado de que no ha habido heridos.
Se trata de una arteria del Canal que vierte hasta 1.200 litros por segundo y que, debido a la rotura, ha ocasionado lavado de tierras, lodos y escombros, que ha absorbido el alcantarillado de la calle.
Pese a ello, ningún sótano ni garaje se ha visto afectado y los Bomberos han revisado los edificios para comprobar que son seguros. El Servicio de Limpieza Urgente (SELUR) está retirando el barro y los restos arrastrados por el agua, por lo que el tramo afectado permanece cortado el tráfico por seguridad.