Así lo han comunicado desde COGAM tras conocerse que ocho individuos agredieron este pasado domingo por la tarde a un joven, amenazándole y provocándole varios cortes con navajas cuando entraba al edificio donde vive en el madrileño barrio de Malasaña.
El denunciante, un español de 20 años, volvía casa cuando fue abordado en el portal por este grupo, que le profirió insultos como "maricón de mierda". También le propinaron varios cortes con una navaja tanto en el labio inferior como en el glúteo, donde le marcaron la palabra "maricón", dejándole malherido tumbado en el suelo.
Para COGAM, esta "nueva" agresión se inserta dentro de "esta espiral de agresiones que preocupa". Por ello, ha instado tanto al Gobierno regional como al municipal a "utilizar todos los medios legales, que tienen muchos, para evitar este tipo de agresiones".
Mantiene la organización que estas agresiones responden a la existencia de "un discurso de odio que ampara a una serie de personas que siempre han sentido ese odio, pero ahora cuentan con un respaldo político para llevarlo a cabo". "Las autoridades públicas tienen que pronunciarse y actuar", han apuntado.
El consejero de Educación, Universidades, Ciencia y portavoz del Gobierno regional, Enrique Ossorio, ha mostrado este lunes su condena a la "dura" agresión homófoba del Gobierno regional ante este hecho, así como a cualquier tipo de acción violenta.
Por su parte, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha lanzado que "Madrid debe ser una ciudad libre de violencia homófoba, machista", y ha expresado el compromiso "firme e inequívoco" del equipo de Gobierno para su erradicación.
El regidor ha tachado a los presuntos autores de "indeseables", y ha añadido que espera que "caiga sobre ellos el peso de la ley". Además, ha defendido que la capital de España es una ciudad "libre, abierta y diversa", y ha precisado que mantener un acuerdo de investidura con Vox "no quiere decir que todo lo mande Vox".
Por su parte, la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Mar Espinar, ha llamado a los madrileños, "sean de izquierdas o de derechas" a "decir hasta aquí" contra las agresiones a personas LGTBI.
Para la socialista, "alguien ha abierto la jaula de las bestias, y es gente con tanto odio que necesita de una violencia extrema". "Esto es algo muy serio y grave; el segundo escalón del camino de la intolerancia", ha lamentado.
En su cuenta de Twitter, la portavoz del PSOE en la Asamblea de Madrid, Hana Jalloul, ha tildado de "horror e intolerable" el suceso. "Los discursos de odio generan delitos de odio. Tenemos que combatirlos ya", ha lanzado.
Por su parte, en esta misma red social, el diputado de Más Madrid, Eduardo Fernández Rubiño, ha reconocido que existe "un problema grave de auge de delitos de odio en número y en gravedad". "Todas las instituciones deben actuar en el marco de sus competencias. Ayuntamientos, Comunidades y el gobierno central pueden hacer mucho y no pueden seguir impasibles. La Comunidad de Madrid debería convocar de inmediato el Consejo LGTBI y dialogar con los colectivos", ha pedido.
Desde Unidas Podemos, la diputada Paloma García Villa ha criticado que algunos digan luego que "por qué hay orgullo". "Luego, que si somos unos ofendiditos, que si la diversidad y el 'brilli brilli' son malas para la cuestión de clase, que si los chiringuitos, que si la visibilidad no, que cada quien en su casa. Idos a la mierda", ha escrito en esta misma red social.
La portavoz de Vox, Rocío Monasterio, en declaraciones a los periodistas, ha trasladado que condenan esta "presunta agresión" y ha instado a poner las medidas para "que nadie sea agredido por su orientación sexual". Ha recordado que el Código Penal existe para eso, "para castigar cualquier agresión y que se cumpla estrictamente". "Aquellos que discriminen a alguien por su orientación sexual tienen que ser castigados, siempre con presunción de inocencia", ha zanjado.