Las salas de cine españolas, con el apoyo del Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), han lanzado la campaña 'Yo voy al cine' que, durante cuatro días, del 27 al 30 de septiembre, ofrecerán entradas a 3,50 euros.
Tal y como han explicado desde los cines, con esta campaña el sector "quiere mostrar el agradecimiento de la industria a todos los espectadores que ya han vuelto a disfrutar de la magia de las películas en la pantalla grande durante este último año".
Además, la iniciativa buscará fomentar la asistencia a salas de cine de aquellos espectadores que "todavía no han regresado como un hábito social y cultural", además de reivindicar la seguridad de los cines como espacios culturales seguros.
Desde FECE se ha señalado que los meses de verano han dejado los mejores datos de taquilla desde que se reabrieron los cines hace ya más de un año. Para participar en esta acción, los espectadores no tendrán que realizar ninguna inscripción previa.
Así, las entradas se podrán comprar el domingo 26 de septiembre exclusivamente por Internet, tanto en las web de los cines como en las webs tradicionales de venta de entradas, y a partir del lunes 27, tanto por Internet como en la taquilla de los cines. Toda la información del evento está ya disponible en www.cineseguro.com.
Durante estos cuatro días, los espectadores podrán disfrutar, entre otras, de películas como ¡A todo tren! Destino Asturias, Blue Bayou, Candyman, D'Artacan y los tres mosqueperros, Fast & Furious 9 o La purga infinita, entre otras.
Precisamente, el pasado jueves se conocía que el Ministerio de Cultura y Deporte ha redactado un proyecto de Real Decreto que contempla la concesión de 10,2 millones de euros en ayudas directas a las salas de cine, "que se han visto enormemente afectadas por la situación extraordinaria" de crisis sanitaria ocasionada por la COVID19.
En el texto se recuerda que el subsector de la exhibición cinematográfica se vio obligado al cierre completo de las salas, por fuerza mayor, durante buena parte del año 2020, y posteriormente, ha afrontado la reanudación de su actividad empresarial "con importantes limitaciones de los aforos".
Cultura justifica estas ayudas en el contexto de "una clara caída de la asistencia de espectadores, ocasionada tanto por la incertidumbre sanitaria existente como por la reducción en la oferta de estrenos de películas, que esperaban un mejor escenario".
El departamento de Miquel Iceta entiende que las salas de cine, cuyos ingresos dependen de la venta de entradas y la participación de un público, conforman uno de los subsectores "más perjudicados" por la COVID19 y también afecta a empresas de distribución y las productoras de obras cinematográficas.