En un comunicado, la Mesa de Atención Primaria del ICOMEM ha exigido al Gobierno de la Comunidad de Madrid que adopte medidas de manera urgente, con más refuerzo de personal, adelantar las vacaciones escolares y establecer restricciones a la concentración de personas de cara a la Navidad.
El Gobierno regional ha reforzado los recursos de las 28 unidades específicas de Atención COVID (UACov) en la región, ante el incremento de la contagiosidad por SARs-CoV-2 en las últimas semanas. Así, ha dado instrucciones para que se concentre en ellas la mayor parte de los 1.500 profesionales contratados en Atención Primaria como refuerzos frente a la pandemia y que se sumen a la labor que estas UACov realizan en el rastreo de contactos, seguimiento de la situación clínica, estudios de confirmación por la mayor utilización de test de autodiagnóstico.
Todo ello, en un momento en el que la Comunidad se enfrenta "al colapso" de la Atención Primaria y "a sus graves consecuencias sobre todo el sistema asistencial", si la estrategia del Gobierno regional se basa en el autodiagnóstico y el aislamiento posterior, según ha advertido el Colegio de Médicos.
El impacto del nuevo pico epidémico sobre la actividad de Atención Primaria se refleja en el incremento de las actuaciones relacionadas con la COVID, la más alta de los últimos meses con más de 284.000 consultas sólo el jueves, según datos de la Comunidad.
De este modo, el número de pruebas diagnósticas para confirmar o descartar la infección ascendió a un total de 27.998, de los que en concreto 16.661 corresponde a test de antígenos (con tasa de positividad de 21%) y un total de 11.337 pruebas PCR. Además, los profesionales de Atención Primaria confirmaron ayer la positividad de 1.769 test de autodiagnóstico de COVID (comprados en las farmacias).
Con respecto al número de pacientes en seguimiento por parte de los profesionales de los Centros de Salud, por ser caso o contacto estrecho con un positivo, asciende a 6.441 personas, que se encuentran en domicilio al tratarse de casos leves.
"Con estos datos", la institución colegial ha trasladado su "profunda preocupación ante esta grave situación" y ha reclamado la adopción de medidas "que han demostrado su alta efectividad ante estas situaciones epidémicas con tan altísima trasmisión comunitaria", con la reorganización "urgente" de la atención sanitaria.
Así, ha abogado por priorizar "de forma selectiva" toda la atención urgente o no demorable y limitar nuevamente el resto, "dada la saturación y falta de recursos humanos reconocidas por instancias superiores, para poder abordarlo todo de la forma más segura posible".
También ha reclamado establecer restricciones a la concentración de personas, especialmente en recintos cerrados, hostelería, transportes públicos y otros eventos sociales, así como adelantar las vacaciones escolares para evitar la diseminación de la nueva cepa en población infantil no vacunada.
También apuesta por reforzar las plantillas de este nivel asistencial y, en especial, aumentar los agentes COVID en los centros de salud, con el objetivo de poder "reorganizar" la atención, de forma que se puedan establecer circuitos diferenciados y asegurar la separación de los pacientes con sospecha de COVID y los que no.
Finalmente, ha abogado por la puesta en marcha de campañas de concienciación permanentes, "estimulando y exigiendo las actitudes personales que favorecen la lucha contra la infección: mascarillas adecuadas en cualquier ámbito de posible transmisión comunitaria, en exteriores y sobre todo en recintos cerrados, distancia interpersonal, ventilación, lavado de manos".