"Estos datos sitúan a la región en un estado de normalidad en sus reservas de agua, si bien, y dado que se desconoce el régimen de lluvias que traerá la primavera, es necesario hacer hincapié en un consumo responsable y eficiente de este recurso", señalan este viernes desde el ente público.
Los primeros meses del año hidrológico han sido secos y esto se ha reflejado en las aportaciones recibidas hasta el momento en los 13 embalses gestionados por Canal de Isabel II: los ríos han aportado 110 hectómetros cúbicos de agua, un 66% menos que lo que se consideraría un ejercicio medio.
Con todo, el estado de las reservas superficiales de la Comunidad de Madrid es mejor que el del resto de la cuenca del Tajo, donde se sitúan los embalses que abastecen de agua a la región. En concreto, se encuentran al 45,67%, 13,5 puntos porcentuales por debajo del valor registrado por los embalses de Canal.
La consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura, Paloma Martín, ha visitado hoy la presa de Pedrezuela, que regula las aguas del río Guadalix y que, en la actualidad, se encuentra al 82% de su capacidad máxima, con 33 hectómetros cúbicos de agua almacenados.
La consejera ha destacado que "el consumo de agua en la región, desde que comenzó el año hidrológico en octubre, es un 1,7% inferior al del curso anterior: esto demuestra que los madrileños son responsables en el uso del agua y estamos seguros de que seguirán siéndolo en los próximos meses, sea cual sea la situación meteorológica".
En la Comunidad de Madrid, que se sitúa en una zona de clima mediterráneo continental, los años secos son periódicos y suelen manifestarse cada cuatro o cinco años.
Así ha ocurrido recientemente en 2012 y 2017, aunque en ambos casos no se llegó a la declaración de sequía, que sí se determinó, por última vez, en 2005.
Desde dicho episodio, y gracias a medidas adoptadas en los últimos 17 años, el consumo en la región madrileña se ha reducido en un 20% (19,9% de 2005 a 2021) mientras que la población abastecida en la región ha crecido casi un 14%, lo que significa una reducción del consumo per cápita del 34% de los ciudadanos.
Además de hacer un llamamiento al consumo responsable, poniendo a disposición de la ciudadanía recomendaciones y consejos de ahorro en sus redes sociales y página web, Canal de Isabel II trabaja en el desarrollo de actuaciones que aumenten la eficiencia de su red y permitan preservar este recurso para su consumo.
La empresa pública apuesta por impulsar el consumo del agua regenerada para riegos de zonas verdes y usos industriales, preservando así el agua de consumo, y, además, realiza un importante esfuerzo en renovación de red, prelocalización de fugas o sectorización para controlar pérdidas ocultas.