Se trata de los nueve consorcios que el gestor ferroviario ya seleccionó en una criba inicial para presentar posteriormente sus proyectos, a excepción de un décimo consorcio, el compuesto por Skidmore, Owings & Merril, TEC-Cuatro, AVA Arquitectura Técnica y Gestión (Rafael de la Hoz), que ha quedado excluido por encontrarse uno de sus componentes en concurso de acreedores.
De esta forma, Esteyco, UNStudio y b720 Arquitectura; RSHP Rogers Stirk Harbour, Luis Vidal Arquitectos, Fhecor Ingenieros Consultores, Carlos Fernández Casado y Audinglntraesa; WSP Spain-APIA, Saitec, Souto Moura-Arquitectos, Mangado y Asociados y Ezquiaga Arquitectura, Sociedad Territorio; y Técnica y Proyectos, Grimshaw Architects y Rubio Arquitectura han presentado algunos de los proyectos que pasan a la siguiente fase, según Adif.
Asimismo, cierran el listado Aecom Inocsa; Ayesa Ingeniería y Arquitectura, Zaha Hadid Architects e Italferr; Idom Consulting, Engineering, BIG y AREP Ville; TPF Getinsa Euroestudios, INES Ingenieros Consultores, Nexo Arquitectura, OMA Internacional; y Foster+Partners, Sener Ingeniería y Sistemas, Ove Arup and Partners y Junquera Arquitectos.
Ahora será un jurado el que evalúe los diseños y las ofertas técnicas que se presenten, sin conocer la identidad de los autores de cada propuesta, y decidirá a partir de criterios técnicos, funcionales y económicos.
La valoración técnica representará el 90% de la puntuación final y el 10% restante estará relacionado con la oferta económica. La propuesta ganadora finalmente será la que tenga la mejor relación calidad precio, según esta ponderación.
El equipo que resulte seleccionado antes de final de año será el encargado de redactar los proyectos que permitirán acometer la remodelación y actualización del complejo ferroviario de la estación de Madrid Chamartín-Clara Campoamor, así como la urbanización del entorno, en un plazo de 72 meses.
El contrato, que incluye la redacción de los anteproyectos y los proyectos para acometerlo, se estima en 29 millones de euros. El conjunto del proyecto de remodelación y ampliación en que está inmersa la estación representa una inversión estimada global de 1.000 millones de euros.
El diseño de la futura estación Madrid-Chamartín-Clara Campoamor, además de funcional, para responder a su futuro papel de ‘hub’ de transporte multimodal, deberá ser representativo del ferrocarril y la ciudad e integrarse en el entorno.
Un diseño singular que convertirá a la estación en una instalación sostenible económica y medioambientalmente: contará con luz natural, el mínimo consumo de energía, que será renovable, y máxima resiliencia a los efectos del cambio climático.
También más accesible y conectada. El diseño comprenderá la reordenación de la plaza en la que se ubica, para facilitar el acceso peatonal, ampliar el aparcamiento y habilitar espacios para todos los modos de transporte de última milla, primando los más sostenibles.
De igual forma, optimizará la integración de la estación con la ciudad, especialmente con Madrid Nuevo Norte, desarrollo urbanístico del que constituye centro neurálgico, en el que se abordará una de las actuaciones clave de esta integración: la cobertura de su haz de vías de 200.000 m2 con una losa, sobre la que se ubicará un gran parque.
La remodelación del edificio de la estación, junto con la ampliación que se desarrolla para ampliar su vestíbulo y su número de vías, preparan a Chamartín para afrontar los retos de la nueva movilidad sostenible e inteligente: el aumento del tráfico ferroviario de pasajeros, asociado a la liberalización; la multimodalidad; la transformación digital y los nuevos hábitos de consumo del viajero, en un contexto de mayor conciencia social sobre la sostenibilidad.
La liberalización del transporte ferroviario de viajeros conllevará una mayor oferta de servicios y frecuencias y, con ella, un mayor tráfico de pasajeros a la estación. También contribuirá a ello la puesta en servicio de nuevas líneas, como la conexión de alta velocidad con el aeropuerto Madrid-Barajas y el túnel para trenes de alta velocidad recientemente puesto en servicio, que la convierte en estación pasante de tráficos trasversales y la conectará con Puerta de Atocha.
Madrid-Chamartín-Clara Campoamor será también una estación ‘Insignia’ de la red ferroviaria de Adif, que incorporará más y nuevos sistemas de transporte, promoverá la electromovilidad y los modos de transportes sostenibles para el transporte de última y primera milla y redefinirá algunos negocios, alineados con la evolución de la movilidad (Ecomilla) y la logística. Asimismo, se convertirá en un centro de vida, adaptada a las necesidades de los visitantes -no sólo viajeros, sino visitantes o ciudadanos en general- integrando la estación en su entorno más próximo: el barrio y la ciudad.
Este proyecto contribuye al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): el 9 (promoción de infraestructuras fiables, sostenibles y de calidad); el 11 (acceso a sistemas de transporte seguros, accesibles y sostenibles); el 8 (contribución al crecimiento económico y el empleo), y el 7 (eficiencia energética).