Según la documentación de la Dirección General de Patrimonio Cultural, el presupuesto base será de 88.507,91 euros, que se repartirán en dos anualidades: 59.005,28 euros en 2022 y 29.502,63 euros en 2023. El plazo de presentación finalizó este lunes.
Las condiciones de seguridad, contaminación lumínica, eficiencia energética y determinaciones del Reglamento Técnico de Baja Tensión y los elementos que sirven de soporte a este alumbrado presentan unas características y un diseño "diverso", derivado de actuaciones desarrolladas en distintos momentos históricos, que "no llegaron a introducir criterios de orden en cuanto a la homogeneidad y estabilidad formal de los elementos del sistema de alumbrado".
De esta forma, la Dirección General de Patrimonio Cultural ha subrayado que "debido a la importancia que tienen estos elementos en la construcción del paisaje urbano" es "fundamental" introducir criterios de armonía y homogeneidad en su diseño y posición.
"Madrid es 24 horas y hay que cuidar de nuestro Paisaje de la Luz, tanto de día como de noche. La iluminación es fundamental para poder realzar los monumentos y también para que guarden un sentido escénico. Queremos trazar un plan para embellecerlo, buscando también el ahorro energético", ha subrayado la vicealcaldesa, Begoña Villacís.
El coste anual de la conservación del todo el alumbrado de calle de este eje asciende a 225.600 euros, mientras que el coste del consumo eléctrico es de, aproximadamente, 197.900 euros al año.
Por otro lado, el coste de conservación anual del alumbrado ornamental de las fuentes es de 55.700 euros al año y el coste del consumo eléctrico asciende, aproximadamente, a los 103.700 euros al año.
"Cada vez que acometemos una renovación de luces, lo hacemos buscando el ahorro energético. Hemos ido sustituyendo las farolas por iluminación LED de bajo consumo y, por supuesto, también lo haremos en el Paisaje de la Luz", ha recalcado Villacís.
El paseo del Prado es un paseo arbolado en cuyo entorno se sitúan las grandes instituciones culturales, científicas, políticas, económicas y representativas de la sociedad madrileña y del Estado. Ligado a él, se localiza el parque de El Buen Retiro, antiguo parque real.
Ambos forman un conjunto indisoluble, cuyo origen se remonta a mediados del XVI, cuando por primera vez se concibe un espacio para que todos los ciudadanos "puedan disfrutar" de la naturaleza dentro de los muros de la ciudad, con plantaciones de arbolado y fuentes, junto a otros elementos ornamentales y lúdicos, según consta en el documento.
"Es incuestionable que estamos ante uno de los grandes espacios monumentales de Madrid. El ámbito se ha consolidado como el principal espacio cultural de la capital, al concentrar la oferta museística más destacada y una notable presencia científica. Por esta razón, se ha convertido en itinerario prioritario, tanto para los madrileños como para los visitantes de la ciudad", ha insistido la Dirección General de Patrimonio Cultural.