El último paso inferior del nuevo Nudo Norte, que comunica M-11 con la carretera de Colmenar, sentido aeropuerto de Madrid-Barajas, se abrirá el próximo 30 de noviembre.
Así lo ha anunciado este lunes el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, desde este paso inferior, el segundo de los tres proyectados en el Nudo Norte para eliminar los trenzados viarios que "dificultan una circulación fluida en la zona".
Este nuevo paso inferior elimina el trenzado entre los vehículos que se dirigen por la M-30 a la M-607 (Colmenar Viejo) y los que se incorporan desde el paseo de la Castellana, por la M-30, en sentido avenida de la Ilustración.
De este modo, ha incidido Carabante, "se elimina un punto negro del viario de la ciudad y se alivia la congestión del tráfico que se produce durante las horas punta en la salida de la capital por el paseo de la Castellana".
Gracias a esta obra se busca conseguir que el conductor ahorre en su desplazamiento cuatro minutos diarios, que son "miles de horas ahorradas a lo largo del año, mucho dinero ahorrado en combustible, en energía y sobre todo mucho ahorro de contaminación".
Este nuevo paso inferior tiene una longitud de 469 metros y una anchura de 7,5 metros. Se compone de un carril de circulación de 3,50 metros de ancho y dos arcenes de un metro. La nueva calzada cuenta, además, con una acera de 0,75 metros de ancho a cada lado de la vía.
Desde el punto de vista eléctrico y de iluminación cuenta con generadores de emergencia, sistema de alimentación ininterrumpida, iluminación de seguridad y de emergencia, así como la habitual para generar una conducción segura.
También se han instalado sistemas de ventilación mecánica, de detección y protección contra incendios, detección de gases, presurización de salidas de emergencia, control de accesos y gálibo, así como otros sistemas de seguridad necesarios para este tipo de infraestructuras.
Todos estos sistemas han sido centralizados mediante un sistema de Seguridad y Control (ITS) que permitirá controlar todos los equipos y señales de forma remota desde el Centro de Control de Tráfico de Calle 30, a través de tecnología avanzada para dotar a la nueva calzada de un elevado nivel de seguridad.
La reforma del Nudo Norte es una de las apuestas de la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360 para conseguir una ciudad más sostenible mediante la reducción de la congestión del tráfico y con ello, la mejora de la calidad del aire. "Era uno de los puntos negros de la congestión, donde se produce la circulación en hora punta de 66.000 vehículos todos los días", ha señalado el delegado.
La obra se basa en la eliminación de cuatro trenzados viarios (uno superior y tres inferiores) que provocan atascos y contaminación ambiental, así como lumínica y acústica. El pasado mes de febrero se abrió el viaducto superior, en el mes de mayo el primer paso inferior, y este martes se ha abierto el segundo de los accesos inferiores proyectados. Con la apertura del tercer y último paso inferior la obra quedará culminada.
El Nudo Norte soporta una circulación de 34.000 vehículos diarios en hora punta de la mañana y 33.800, en la franja de tarde. Con la remodelación, se prevé el ahorro de tiempo en los desplazamientos privados de un 31% (3.667 horas/día) al aumentar la capacidad en los puntos críticos y la supresión de cruces. En cuanto a los niveles de congestión, llegarán a reducirse en un 70%.