El moño es un clásico atemporal, que nos salva de muchas situaciones incómodas. Ideal para bodas, pero también para todo tipo de celebraciones como por ejemplo, las fiestas navideñas.
También son una buena elección ir a la oficina a trabajar en su versión más informal, con un moño bajo despeinado, con los mechones delanteros sueltos para un toque más desenfadado: “A una de las muchas cenas de empresa que tendremos estos días, un look sofisticado nos lo puede dar un moño bajo ultrapulido, al que podemos añadir un poco de brillo y definición, o uno alto desenfadado con flequillo y mechones sueltos, si es una reunión de amigos”, sugiere Ismael De Felipe (Padilla, 74).
A Paul Tudor, director del salón David Künzle Fuencarral, junto a la Glorieta de Quevedo, uno de los moños que más le gusta es el 'Ballerina': “Es un moño que se puede hacer alto o bajo, pero sin apretarlo demasiado para una fiesta, hay que dejarlo un poco suelto como más salvaje y bohemio, desestructurado y casual, para no aparentar demasiada rigidez, porque no es la ocasión ni el lugar”. Un problema que nos podemos encontrar es el encrespamiento, si bien hay multitud de productos 'antifrizz', como sprays u otros, enriquecidos con ácido hialurónico, que redefinen e hidratan, pero también aceites, espumas o mascarillas exprés: “Un consejo, sin duda, está en texturizar el cabello (darle volumen) previamente a hacernos el moño”.
También muy de moda, la coleta-moño y el moño alargado, o el moño bien pulido, que además es super elegante, debe peinarse todo para atrás, dejándolo bien tirante, para después fijarlo, sin apelmazar, con laca o gomina: “O los ultrapulidos, que estilizan mucho y son ideales con raya en medio o a un lado. También, podemos acompañarlos con joyas, horquillas o diademas”, aconseja De Felipe.
– SLICK. En este moño, no importa tanto su altura (alto o bajo) como el efecto 'lifting' que genera al llevar todo el cabello hacia atrás. Es sumamente juvenil y elegante. Se lo hemos visto en ocasiones a Jennifer López, Gwyneth Paltrow o Emily Blunt.
– BALLERINA. Aunque existen varios tipos, el clásico es un moño alto, que recoge todo el cabello de manera que no quede ningún pelo suelto. Sencillo y de inspiración romántica, lo llevan como nadie algunas actrices como Rooney Mara o Penélope Cruz, que recordemos, estudió ballet antes de lanzarse a la interpretación.
– TOP KNOT. Es un moño alto que se caracteriza por estilizar el rostro y cuello, además de la figura, ideal para mujeres de poca estatura. Son asiduas, con o sin flequillo, Taylor Swift o Kate Hudson.
– TRENZADO. No tiene ningún secreto, es un moño hecho con una trenza de los muchos que vemos en las bodas. Para estar más segura de que no vaya a desenredarse, puedes fijarlo con un spray o con laca. Lo han llevado increíblemente, actrices como Charlize Theron, Elsa Pataky o Jennifer Lawrence.