Arrancará la sesión a las 13.00 horas. En ella, el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, será el encargado de dar detalles y explicaciones sobre una situación que arrancó con la ampliación del sistema.
La nueva etapa de bicimad, basada en su expansión a los 21 distritos de la ciudad, arrancaba el 7 de marzo, con la puesta en marcha de 700 nuevas bicicletas 100% eléctricas repartidas a lo largo de 13 distritos (Arganzuela, Carabanchel, Chamartín, Ciudad Lineal, Fuencarral-El Pardo, Hortaleza, Latina, Moncloa-Aravaca, Moratalaz, Puente de Vallecas, San Blas-Canillejas, Tetuán y Usera) y con 60 estaciones a estrenar.
Además, otra de las grandes propuestas anunciadas por el equipo de Carabante fue la puesta en marcha de la gratuidad del servicio, hasta el 31 de julio, durante media hora de trayecto.
Sin embargo, las incidencias llegaron pronto. El mismo día de la inauguración del nuevo bicimad ya se detectaron problemas tanto en los anclajes, como en la plataforma informática. Explicaron desde el Gobierno municipal que esos problemas se habían contemplado y que provenían de la migración del viejo al nuevo sistema.
Y es que, al comenzar el nuevo proyecto, los abonados de bicimad debían migrar su cuenta ya existente al sistema MPass, a través del asistente de migración de la aplicación. Al darse de alta en MPass, el usuario asocia su perfil a un medio de pago sobre el que se van cobrando los viajes realizados o los abonos contratados.
Mientras comenzaban a solventarse las incidencias sobre las plataformas, comenzó a ponerse de manifiesto que no había bicicletas en las estaciones. Estas comenzaron a aparecer en sitios no autorizados para depositarlas. El alcalde, José Luis Martínez-Almeida, aseveró que habían llegado a aparecer bicicletas extraviadas en urbanizaciones privadas de la capital.
Se achacó todo a que no se habían comunicado "debidamente" las condiciones en las que se deben dejar estacionadas las bicicletas.
Comenzó entonces un plan de choque en el servicio público de bicicletas por el que se incorporaban un 40% más de trabajadores (20 personas, distribuidas en diez equipos) para localizar las bicicletas "dispersas o mal estacionadas", en turnos de 24 horas.
Más tarde, se incrementó hasta 60 el número de operarios que recogen las bicicletas dispersas por la capital, así como 50 informadores para explicar sobre el correcto funcionamiento del nuevo sistema.
Más Madrid, como grupo político solicitante de este Pleno extraordinario, busca explicaciones y soluciones al "caos absoluto" que reina en bicimad, del que han acusado a Martínez-Almeida. La formación que lidera Rita Maestre se ha comprometido a "rescatar el servicio de nuevo" si las urnas les son favorables.
"Dijimos que iba a colapsar, que sin mejorar las plantillas es imposible que, al ampliar un servicio, se mantenga la calidad. Ahora lo que queremos no son sólo explicaciones, sino soluciones, de forma inmediata", reclamaba Maestre días atrás.
También ha cuestionado esta formación la convocatoria del Pleno extraordinario solicitado en plena Semana Santa, y señalan que el Gobierno de Almeida "ha decidido saltarse su propia instrucción en torno a la presencialidad".
Dicha instrucción, que volvió a aplicarse desde el pasado febrero, "dice de forma muy clara que hay dos razones por las que un concejal o concejala puede no acudir al Pleno, por baja de maternidad o de paternidad o por una enfermedad grave". Esperan en Más Madrid que los 57 concejales, sobre todo los del gobierno, estén presencialmente este martes.
En todo caso, en Más Madrid acusan a Almeida de dejarse llevar por "una operación electoralista cuya puesta en marcha, con mucha propaganda y cero planificación, ha costado 48 millones de euros, 30 de ellos procedentes de los fondos europeos, y que sólo ha servido para cargarse el servicio y dilapidar el dinero".
A la petición de un Pleno extraordinario se sumaba el PSOE exigiendo la dimisión del delegado de Medio Ambiente y Movilidad y presidente de EMT, Borja Carabante, y del gerente de la empresa, Alfonso Sánchez Vicente.
Los socialistas creen que el Gobierno municipal ha "utilizado torticeramente" bicimad "para un anuncio electoral y luego se han olvidado de utilizarlo". "El caos de bicimad exige que se asuman responsabilidades políticas. Han convertido Madrid en un safari de bicicletas rotas y perdidas", lamentado el edil Ignacio Benito.
La portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Mar Espinar, acusaba a Almeida de "destrozar bicimad" con una "precipitada" ampliación, que se traduce en "500 bicis desaparecidas". En el último Pleno ordinario calificó de "sindiós" lo que ocurre con el servicio público de bici de alquiler.
"Las bicicletas nuevas no se pueden anclar en las viejas; es un sindiós. La gratuidad no funciona y s´0lo en la primera semana 500 bicicletas han desaparecido", enumeraba.