Se trata de un proyecto destinado a solventar las carencias observadas entre las personas mayores, sobre todo a partir de la pandemia de coronavirus, y las consecuencias que produjo en ese colectivo, como la soledad no deseada, preocupación por la salud y necesidad de sociabilizar.
Entre sus objetivos, destacan la integración de las personas mayores en el mundo digital, mejorar el uso de las nuevas tecnologías, favorecer el acceso a la información, la educación y la comunicación y atender las demandas para acceder a los servicios cada día más digitalizados, como la sanidad o las relaciones con entidades públicas y privadas.
De forma previa a la implantación del proyecto, la biblioteca realizó un estudio demográfico y recopiló diversos estudios sobre la brecha digital entre las personas mayores. Con posterioridad, y con el objetivo de dar a conocer esta iniciativa, se realizó una difusión a través de cartelería, redes sociales (consultadas por familiares cercanos) y correos masivos a los usuarios. Se logró en la primera convocatoria, en noviembre de 2021 una inscripción de 80 personas.
Los participantes reciben una formación de 12 sesiones de una hora, de miércoles a viernes durante cuatro semanas, en la que se les enseña a obtener el mayor rendimiento a las aplicaciones que, actualmente, están disponibles en los teléfonos móviles.