En concreto, se trata de una gran exhibición protagonizada por un monoplaza del equipo Red Bull Racing, bajo los mandos del piloto mexicano Cheno Pérez, en un improvisado circuito urbano alrededor de la plaza de Cibeles, incluyendo enclaves monumentales madrileños como la Puerta de Alcalá, el edificio Metrópolis o el paseo de Recoletos, entre otros lugares emblemáticos.
La asociación vecinal ha reclamado una rectificación, tanto a Comunidad como al Ayuntamiento, para que el evento se traslade "a un lugar menos sensible" y, en este marco, ha animado a la ciudadanía a enviar reclamaciones a ambas administraciones, así como cartas a la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay.
Desde la Federacion Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) han recordado que esta iniciativa "para promocionar la famosa bebida energética" tendrá lugar gracias a "la colaboración del Gobierno de Isabel Díaz-Ayuso y los permisos del Consistorio, que dirige José Luis Martínez-Almeida".
El colectivo vecinal ha publicado un modelo de misiva dirigido a ambos en su página web (avretironorte.es/no-a-la-formula-1-en-el-patrimonio-de-la-humanidad), en el que se reclama el cambio de ubicación. "Creemos que los lugares que son patrimonio mundial deberían ser protegidos por los gobiernos locales y esperamos que usted pueda alentar a Isabel Díaz Ayuso y a José Luis Martínez-Almeida a trasladar este evento a una ubicación adecuada".
"No entendemos por qué este tipo de eventos publicitarios, que no tienen ninguna historia en Madrid, no se realizan en lugares apropiados. A nosotros, los vecinos y vecinas residentes, sólo nos generan molestias y consecuencias negativas, un impacto en nuestra salud y destrozos en una zona que tiene protegido su patrimonio. Además, supone la paralización de la circulación en el centro de la ciudad para beneficio de una empresa privada, es escandaloso", sostiene Ángeles Rodríguez de la Cara, presidenta de la Asociación Vecinal Retiro Norte.
En esta línea, la asociación ha recordado que llevan tiempo alertando de la transformación del centro de la capital "en una suerte de parque temático de ocio y diversión para turistas" y consideran que este evento "no hace más que reforzar esta tendencia, un proceso que empuja a los vecinos y vecinas residentes a abandonar progresivamente sus barrios".
"Nuestros gestores no tienen ningún pudor en ceder el espacio público a compañías privadas para su exclusivo beneficio, aunque esto suponga enormes molestias en esos vecindarios o incluso, como es el caso, el riesgo de que la ciudad pierda algo tan importante como el reconocimiento del Paisaje de la Luz como Patrimonio de la Humanidad", ha advertido.