Famma ha recordado que "no todos los itinerarios del parque, ni sus instalaciones, son accesibles, discriminando, así, en su uso a las personas con discapacidad".
Además, as personas con discapacidad demandan "un plano que contenga información sobre las puertas, itinerarios principales y servicios accesibles (aseos, cafeterías o entrada a pabellones)".
Ahora se encuentran con "adoquines, escalones y falta de mantenimiento de las rampas, que hacen del parque un lugar complicado de transitar para quienes tienen problemas de movilidad reducida". "En la mayoría de las situaciones, se trata de obras menores que asegurarían la igualdad de oportunidades en el acceso a estos servicios de las personas con discapacidad", han apuntado.
Otro de los problemas detectados es la necesaria dotación de aseos accesibles en el parque y comunicar adecuadamente su ubicación, condiciones físicas y su acceso. A esta carencia se une que "muchos quioscos, por su posición sobre la acera y por la ausencia de mostrador accesible, están vetados a personas con discapacidad, creando una clara discriminación".
Esta mejora "conlleva solamente un cambio en la gestión y elección de los modelos". Otra de las cuestiones detectadas es la necesidad de escoger modelos de rejillas y rigolas que sean accesibles, a fin de no producir fronteras entre espacios por las que no puedan pasar personas en sillas de ruedas.
Igualmente es necesario asegurar el acceso a las fuentes de todas las personas, "lo que es imposible en la mayoría de los casos". "Ya no hay excusas que valgan como que no salgan los presupuestos o que es el inicio de la legislatura. Es el momento de que el parque del Retiro sea accesible al cien por ciento", ha manifestado el presidente de Famma, Javier Font.