Como todos los jueves, desde hace más tres de años –menos en navidades y en los momentos más calurosos del verano–, los vecinos acudirán a las puertas del centro de salud ubicado en la avenida de Abrantes, 55, para denunciar la falta de profesionales médicos en el centro.
Según han señalado, este centro de salud, que atiende un área con una población de 30.000 personas, contaba con una plantilla de 16 médicos de familia en febrero de 2020, justo antes del inicio de la pandemia de la COVID19, ocho en el turno de mañana y ocho en el de tarde.
No obstante, han asegurado que, "los recortes y el abandono de la Atención Primaria, lo han dejado desguarnecido" y, ahora, cuenta con seis médicas de mañana y una facultativa en el turno de tarde, aunque el número puede variar cada día dependiendo de si hay alguna profesional de baja o de vacaciones.
"En agosto, por ejemplo el centro ha tenido entre dos y tres médicos de familia, ninguna por las tardes (aunque algunas tardes había un facultativo de urgencias)", han explicado.
"No es un caso aislado. Situaciones similares se dan el los otros seis centros de salud que hay en el distrito de Carabanchel, como consecuencia de los recortes en Sanidad. En el conjunto de la Comunidad de Madrid, según estimaciones de profesionales de la salud, falta un 20% de médicos de familia", ha detallado la Asamblea de Carabanchel en un comunicado.
En este marco, los vecinos del barrio han reclamado una reunión con el nuevo equipo de la Consejería de Sanidad, que capitanea Fátima Matute, y más concretamente, con la Gerencia de Atención Primaria, encargada de la gestión de los centros de salud públicos en la región.
En este encuentro, tras el relevo en el departamento tras las elecciones, los vecinos quieren escuchar las explicaciones de los nuevos responsables de la cartera sobre la situación de este centro en concreto y la situación del resto, en general.