Los trabajos, que cuentan con un presupuesto de 2,1 millones de euros, están siendo ejecutados sobre una superficie total de 6.450 metros cuadrados, ha informado el Ayuntamiento de Madrid.
La remodelación de la calle de Juan Álvarez de Mendizábal ya ha finalizado, mientras que la de Irún concluirá en primavera. Con estas actuaciones, el Ayuntamiento completa el sistema de accesibilidad del barrio de Príncipe Pío con Plaza de España, a través de tres ascensores –dos ya existentes y otro, incluido en este proyecto–, el mismo número de escaleras y una rampa como alternativas para salvar el desnivel entre el barrio y el resto de la ciudad.
La remodelación de la calle de Juan Álvarez de Mendizábal abarca el tramo comprendido entre Luisa Fernanda y plaza de España. El primer tramo se ha configurado como 'calle escolar', con una plataforma única peatonal frente al CEIP Portugal. La calle cuenta ahora con aceras más amplias y un área estancial con bancos y árboles frente al acceso al centro educativo.
Los nuevos pavimentos permiten una movilidad peatonal "más cómoda, fluida y adecuada a los vigentes criterios y normativa en materia de accesibilidad universal". Para ello, la sección se ha ordenado con una banda peatonal a ambos lados, una zona central para el tráfico rodado y una banda de aparcamiento.
La actuación también ha incluido la mejora y renovación del mobiliario urbano, así como la instalación de nuevas luminarias más eficientes en materia energética y una fuente de beber y la plantación de once nuevos árboles.
En la calle de Irún la intervención incluye el descenso desde la plaza de España y el primer tramo de esta vía hasta el cruce con Cadarso. El proyecto, que da respuesta a las demandas de los vecinos de la zona, consiste en la peatonalización de la calzada que desciende desde plaza de España, bordeando el parque del Oeste.
Esta calzada se dividirá en dos partes por medio de un parterre ajardinado. Una parte se destinará al tránsito peatonal, generando de esta manera una rampa accesible con pendiente menor del 6%, que permite salvar el desnivel entre el barrio de príncipe Pío y Plaza de España, y la otra se destinará a itinerario ciclista.
Además se interviene en todo el talud, donde se plantarán más de 400 arbustos y 25 nuevos árboles. La actuación supone también la remodelación total de las escaleras, "que no cumplían con las mínimas condiciones de accesibilidad y seguridad".
Se une a la instalación de un ascensor como alternativa, de dos paradas y libre acceso, entre la cota más alta y el final del vial de descenso hacia la calle de Irún.
Como remate de la actuación y para favorecer una circulación rodada más segura para los peatones, la remodelación incluye el tramo de Irún entre el paso inferior y la calle de Cadarso, que contará con medidas de calmado del tráfico.