Se trata de una de las medidas que incluirá el nuevo Plan Estratégico de Metro, que ha avanzado la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, durante su visita a las obras de ampliación de la línea 3, que une las estaciones de Villaverde Alto y El Casar (Getafe).
"Es el futuro y ese futuro ha llegado a Madrid", ha señalado Ayuso, quien ha detallado este proyecto tendrá un horizonte de desarollo hasta 2030. Esta técnica hace que se multiplique por cinco la regularidad de los desplazamientos, ahorra energía al realizar una aceleración y conducción más homogénea y facilitar la respuesta rápidamente a los picos de demanda. También rebajará los tiempos de espera en andén e incrementará la capacidad de pasajeros por hora.
Los primeros cambios hacia esta automatización se van a llevar a cabo en la L6, la más frecuentada de toda la red, con 110 millones de usuarios en 2023, una media en día laborable de 618.000 personas. La dirigente madrileña ha defendido que esta es la idónea para comenzar, por su "importancia estratégica", y ha avanzado que le seguirá la L8, que conecta la capital con el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.
"Conlleva la creación de nuevos puestos de trabajo que ahora no existen, por lo que todos los trabajadores van a ser indispensables para llevar a cabo esta modernización y serán formados para ese fin", ha señalado la presidenta madrileña.
Un gran número de ferrocarriles metropolitanos de relevancia internacional ya han incorporado esta tecnología, tal y sucede en ciudades como Londres, París, Hamburgo, Estambul o Budapest.
Por otro lado, durante el acto, Ayuso ha presenciado el momento en el que han coincidido las obras de prolongación del túnel de la Línea 3 de Metro sentido Villaverde Alto con las de Getafe. Esta unión supone que ya se han perforado 2,2 kilómetros y completado el 65% de los trabajos.
El objetivo del Gobierno regional con este proyecto es dotar a MetroSur (línea 12) de un segundo enlace con la capital, que beneficiará directamente a más de un millón de usuarios de los municipios de Getafe, Leganés, Móstoles y Alcorcón, que llegarán a la Puerta del Sol en media hora, y a unos 47.000 vecinos del barrio de Villaverde Alto.
Esta infraestructura se convertirá en un lugar neurálgico de intercambio modal de transporte público para los ciudadanos, que podrán conectar desde El Casar con la línea 3, Cercanías Renfe, los autobuses interurbanos 447, 448, 488 y N805, y dos urbanos, así como acceder a un aparcamiento en superficie para más de 500 plazas, equipado con área de recarga para vehículos eléctricos. Su inversión, que cuenta con fondos europeos Next Generation, es de 110 millones de euros.
A lo largo de esta legislatura, Metro de Madrid va a experimentar una importante ampliación y modernización. Por una parte, va a realizar la compra de 80 nuevos trenes, que llegarán entre 2026 y 2029, y que representan la mayor renovación de flota en la historia de la compañía, con lo que se mejorará la fiabilidad, eficiencia y capacidad de transporte de viajeros.
Además de esta actuación que afecta a MetroSur, también se está trabajando en la primera fase de desarrollo de la línea 11, desde Plaza Elíptica a Conde de Casal que, cuando concluya, conformará un nuevo eje desde Valdebebas en el Nordeste, hasta Cuatro Vientos, al Suroeste.
Asimismo, el próximo año comenzarán las obras de ampliación de la línea 5, para dotar al Aeropuerto internacional Adolfo Suárez Madrid-Barajas de una nueva conexión directa entre el centro de la ciudad y la principal infraestructura aeroportuaria de España.
El proyecto cuenta con un presupuesto del Ejecutivo autonómico de 209 millones de euros y mejorará la movilidad y accesibilidad de los viajeros, enlazando la parada de Alameda de Osuna con la futura terminal y con la T1, T2 y T3 de la 8, que continúa a la T4.
A estas iniciativas se suma la de la construcción de la nueva línea 13, que arrancará en Chamartín para dar servicio al desarrollo Madrid Nuevo Norte.