La entidad vecinal ha llamado a concentrarse bajo el lema '#A88cm de nuestras casas', en la confluencia entre las calles de Santa Fe y Ribera del Manzanares desde donde se han dirigido a San Pol del Mar, incidiendo en que decenas de viviendas se encuentran a "menos de 10 metros de la autovía urbana", que genera "altos niveles de contaminación acústica y atmosférica".
"Retomamos las movilizaciones por el soterramiento en unas fechas en las que otros barrios afectados por los problemas que ocasionan las autovías urbanas están consiguiendo por fin sus históricas demandas. Nos alegramos especialmente por la victoria vecinal con el soterramiento de la A5 a su paso por el distrito de Latina, aunque apoyamos que este soterramiento vaya hasta la avenida de los Poblados, pues sabemos de sobra lo que es quedarse fuera del soterramiento", sostiene la asociación vecinal.
Desde la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) han advertido que la movilización de este sábado implica el "arranque de un nuevo ciclo de movilizaciones" que incluirá una recogida de firmas con la que acompañar "una denuncia con la que llegaremos hasta la Comisión y el Parlamento Europeo, para que desde estas instituciones puedan presionar al Ayuntamiento de Madrid".
La asociación vecinal Manzanares-Casa de Campo está estudiando demandar al Ayuntamiento por su "por su dejación de funciones en su responsabilidad con la salud y el bienestar" de los 5.000 habitantes de la colonia. Han apuntado, además, a que ya registraron una queja al Defensor del Pueblo y este pidió "que se justificara" el no sorterramiento.
"Queremos un barrio nuevamente conectado con la Casa de Campo, como estuvo antes de ser separado por el crecimiento de la M-30 hasta convertirse en la autovía urbana de tres carriles que es hoy, por más que conserve su condición de calle, un truco que permite evitar toda la normativa que regula en el PGOUM las autovías urbanas. No queremos seguir soportando ruidos y polución", ha incidido la Asociación Vecinal Manzanares-Casa de Campo.
Al respecto, la vicealcaldesa de Madrid, Inma Sanz, indicó esta misma semana que no ve "viable" el soterramiento, aunque indicó que desde el Ayuntamiento hablarán con los vecinos sobre posibles alternativas para mejorar su situación.
Según ha explicado Sanz, no es "una situación sencilla", debido a que no es viable la alternativa que habría durante la construcción de ese soterramiento. "Tenemos a un lado las propias viviendas y al otro lado la Casa de Campo, un bien de interés cultural como la Casa de Campo, una zona verde especialmente protegida y, por lo tanto, no existe la posibilidad que hay en otros sitios de establecer una alternativa durante las obras", indicó.