La delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, acompañada de las concejalas del distrito de Salamanca, Cayetana Hernández de la Riva, y del distrito de Ciudad Lineal, Nadia Álvarez, ha visitado esta martes la pasarela para supervisar los trabajos, que finalizarán a finales de este año.
Las obras cuentan con un presupuesto de 2,8 millones de euros cofinanciados por los fondos Next Generation de la Unión Europea y consisten en la sustitución de los 20 tirantes que cuelgan de las pilas y sustentan todo el dintel, así como la construcción de nuevos anclajes verticales en los estribos.
Además, el proyecto contempla la reparación de las zonas deterioradas del tablero, junto con la mejora de su drenaje e impermeabilización, colocando un nuevo pavimento de resina de poliuretano coloreada.
Asimismo, está previsto retirar y sustituir barandillas, renovar completamente el alumbrado e instalar un sistema que permita la monitorización permanente de indicadores tan importantes como las vibraciones o el comportamiento de la estructura con los cambios de temperatura y de viento.
Como consecuencia de los trabajos que se están realizando, ha sido preciso cortar el paso a peatones y ciclistas, redirigidos hacia la pasarela de Ramón de Aguinaga que conecta Fuente del Berro con la calle de San Marcelo.
Con respecto al tráfico de vehículos, no se contempla el corte total de la M-30, pero sí cortes puntuales y parciales que únicamente se programarán en horario nocturno.
La pasarela de Marqués de Zafra, proyectada hace ya medio siglo por el prestigioso ingeniero Javier Manterola, fue la primera atirantada de Madrid y la tercera que se construyó en España. Entonces, supuso un hito técnico, tanto por su diseño como por su concepto estructural.
La pasarela está compuesta por un dintel formado por tramos prefabricados de hormigón pretensado, que suman una longitud total de 130 metros y unas pilas con forma de A, con 25 metros de altura.