La directora general de Familias, Juventud y Educación del ayuntamiento, Sonia Moncada, ha avanzado este miércoles en la comisión del área que desconocen "si van a ser posibles", en respuesta a una pregunta de la concejala del PSOE Maite Pacheco.
Moncada se ha referido a que el Gobierno de la nación de momento no ha enviado normativa alguna sobre este asunto. "Las circunstancias actuales de la Comunidad en la desescalada hacen que no sea aconsejables los campamentos en un tiempo inmediato", ha apuntado la directora.
De momento, según el plan de desescalada, los colegios únicamente podrán abrirse en fase 2, al que aún se desconoce cuándo llegará Madrid -aunque desde la Comunidad de Madrid se ha pedido pasar directamente de la fase 0,5 a la 2- y también ha recordado que la Asociación Española de Pediatría ha recomendado que los niños de 0 a 6 años no se reincorporen a las aulas antes de septiembre.
Moncada ha apuntado que se han mantenido contactos entre el área y asociaciones y entidades que piden la vuelta de los campamentos, como solicitaba la socialista, pero el ayuntamiento considera esta actividad arriesgada, por el tipo de población destinataria así como por la actividad.
La directora ha dejado abierta la posibilidad de reactivar los contratos, en función de cómo avance la pandemia este verano, por "razones sociales y de conciliación". En cualquier caso, el consistorio está elaborando una estrategia "con un alcance más limitado", con menos niños y desinfección permanente.
La edil socialista Maite Pacheco ha defendido, como hacen las asociaciones representadas por la Fravm, que "se puede organizar un campamento en este momento, con un máximo de 10 o 15 jóvenes, con espacios adaptados cedidos por el ayuntamiento en los que se pueda asegurar la distancia física".
Los campamentos urbanos, ha destacado Pacheco, no sólo aportan beneficios emocionales a los niños, sino que para muchos menores vulnerables "puede ser la única alimentación adecuada en lo que queda de junio a septiembre". "Es lo más parecido a unas vacaciones que estos chicos pueden disfrutar".
Según Moncada, los contratos deben suspenderse porque "no se adaptaban a las nuevas necesidades".