Almeida ha explicado los recursos que el Ayuntamiento de Madrid ha puesto en marcha con motivo de la previsión para los próximos días de nevadas y bajas temperaturas, que “no son habituales” en la ciudad. “Por tanto, estamos preparando todos los dispositivos necesarios para mantener la ciudad en funcionamiento y para abarcar los diferentes aspectos sociales y de situaciones de vulnerabilidad que se puedan derivar de la situación climatológica”.
El alcalde ha recomendado minimizar en los próximos dos días los desplazamientos, para garantizar la seguridad y, en caso de ser necesarios, que se tengan en cuenta las previsiones e ir equipados debidamente. Almeida ha expuesto el “importante esfuerzo que está realizando el Ayuntamiento” para poder garantizar la movilidad en unas “condiciones inusuales” y ha apelado a la colaboración de los madrileños.
Desde que se activó el nivel alerta del Plan de Emergencias Invernales del Ayuntamiento de Madrid (PEIAM) hasta hoy a las 8.00 horas, se han esparcido 1,7 millones de kilos de sal y 286.000 litros de salmuera en calzadas y aceras y en la M-30, en total, 8.448 kilómetros. Además, se han repartido 2.860 kilos de sal en 171 comunidades de vecinos que lo han solicitado. En total, se dispone de 8.910 toneladas de sal y 600.000 litros de salmuera.
En estos momentos, el Ayuntamiento ha dispuesto a 3.884 operarios en diferentes turnos para reducir el impacto de la posible nevada en la ciudad y en cuanto a los medios mecánicos, hay preparadas un total de 66 máquinas quitanieves y 254 esparcidores de sal y salmuera.
Ante la previsión de nevada, también se ha activado el Plan de actuación ante inclemencias invernales del cuerpo de Agentes de Movilidad, lo que supone 170 agentes por turno en las vías principales.
Por su parte, Policía Municipal, a través de las distintas unidades integrales de distrito, vigilará los accesos de entrada y salida a la ciudad, las intersecciones de vías principales y de vías de la red principal de transporte público y cruces de la red básica de transportes.
Del mismo modo, se vigilarán zonas del entorno de los intercambiadores de transportes, estaciones de ferrocarril, el Aeropuerto Adolfo Suarez Madrid-Barajas, el entorno de los accesos a hospitales, a Mercamadrid y otros puntos que se estimen necesarios por el riesgo existente para los usuarios de la vía (vehículos y peatones).