Sin prisa, pero sin pausa: aún nos queda tiempo para disfrutar de su lengua de trapo, pero es importante que vayamos asumiendo que ellos también tienen su espacio y su autonomía.
Tampoco queremos que te estreses a la hora de abordar el orden en el armario de tus pequeños. Por eso, esta semana, vamos a compartir una serie consejos que te ayuden conseguirlo sin demasiado esfuerzo. Además, queremos señalarte algunos 'tips' sencillos que puede ayudarte a fomentar su autonomía al vestirse, una cuestión importante para su desarrollo psicológico.
¿Preparada para comenzar? Pues toma nota que empezamos.
1. Saca toda la ropa del armario, sobre la cama haz pequeños montoncitos por tipos de prendas y decide si vas a continuar manteniendo en el interior del armario otra serie de elementos que no forman parte de su vestuario, como juguetes o productos de aseo e higiene.
2. Organiza el vestuario por usos: diario, semanal o esporádico. Todas aquellas prendas de uso diario las colocaremos en perchas o en baldas con mejor acceso para el pequeño/a. El vestido de la boda de tu cuñada, mejor al maletero, salvo que vayas a ponérselo los domingos para ir a ver a los abuelos.
3. ¿Te has fijado que dónde va una barra de adulto, verticalmente, te caben dos de niño? Importante detalle. Trata de colgar los conjuntos de diario en aquella barra más accesible para el niño e identificarla por perchas de colores para cada día de la semana. El azul para el lunes, el verde martes, naranja viernes… ¡explícaselo y verás como aprenden!
4. No le tengas miedo a las baldas, son muy prácticas siempre y cuando no dejes excesivo espacio entre ellas. Hazlo de manera que puedas quitarla cuando ellos ya hayan crecido y sus prendas sean más grandes. Utiliza este elemento para jerséis, sudaderas y camisetas. Utiliza etiquetas para que se vayan familiarizando con los nombres de cada prenda y su escritura. A todos nos costó aprender a escribir suéter
5. Si prefieres los cajones a las baldas, adelante. Sólo ten en cuenta estas premisas: mejor en cestas que cajones o cajones con un frente transparente que les deje ver el contenido. También puedes poner pegatinas o sticker, para que identifiquen qué es lo que contiene cada cajón. Utiliza los más profundos para chándal y sudaderas, los menos, para ropa interior y pijamas.
6. Para los zapatos, puedes elegir entre baldas con varilla o cajones, sin olvidar que debe tener fácil acceso tu aspirador, pues los zapatos suelen venir cargados de regalos de su tarde en el parque.
7. Si no tienes un lugar en la entra de tu casa para que pueda dejar su abrigo, trata de colocar un gancho dentro del armario para que no se pierda por el salón, la cocina o encima de la cama.
Si aún no ha dejado del todo la etapa del pañal, te recomendamos tener una cesta de tela o de mimbre dentro del armario con pañales, toallitas, cremas y cambiador de repuesto.
Una cuestión muy importante a la hora de establecer el orden vertical y horizontal de su armario es atender a la lógica de su pequeña cabecita. Es decir, lo normal es que cuando busque unos zapatos mire hacia el suelo y cuando busque un gorro de lana, lo haga en la parte más alta de su armario. Incluso puedes poner en la parte interior de las puertas, un vinilo con el dibujo del cuerpo de un niño que le señale como está ordenado su armario y le ayude a localizar perfectamente cada una de sus prendas.
Recuerda que todo lo que puedas necesitar para organizar de un modo eficiente y divertido el espacio para tus pequeños, lo encontrarás en Graden.