Almeida ha plantado el primer ejemplar de roble en el número 374 de López de Hoyos, la calle con el arbolado viario más afectado por la borrasca Filomena. Acompañado por el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, y el concejal del distrito, Ángel Niño, ha recordado que uno de sus compromisos electorales fue acabar con los alcorques vacíos en la ciudad.
Los trabajos ordinarios de gestión del arbolado (retirada de ejemplares peligrosos, dañados, o aquellos que interfieren con determinadas infraestructuras), así como el paso de Filomena han ido provocando, desde hace más de diez años, que una serie de alcorques hayan perdido sus árboles y se encuentren desiertos.
El área de Medio Ambiente y Movilidad ha realizado un estudio exhaustivo sobre los alcorques de la ciudad, permitiendo identificar 11.216 vacíos y susceptibles de albergar árboles, ya que cumplen los "requisitos óptimos" para un desarrollo adecuado de la planta, al mismo tiempo que reúnen las condiciones de compatibilidad para ubicarse en la vía pública.
Para dicho estudio, se han recorrido las más de 5.000 calles arboladas que tiene la ciudad, con el fin de georreferenciar los alcorques vacíos, estudiar su posición y sus características en la vía para determinar la viabilidad de la plantación. El objetivo final es conseguir que los árboles se desarrollen sanos y seguros en estos espacios, proporcionando las mejores condiciones de seguridad, ambientales y ornamentales posibles para el disfrute por la ciudadanía.
Por su parte, Carabante ha indicado que "habrá cerca de 2.000, 2.500 que habrá que tapar por distintas circunstancias". La primera, por modificaciones en la infraestructura, "porque se va a llevar alguna actuación de ampliación de aceras, remodelación de la calle y, por tanto, no es viable".
"En segundo lugar, por temas de seguridad vial, porque muchas veces un árbol puede ocasionar problemas de visibilidad, por ejemplo, para los vehículos, y en tercer lugar problemas de accesibilidad, alcorques que están pegados a estacionamientos de movilidad reducida y que por tanto impide la accesibilidad a personas con silla de ruedas", ha detallado.
La plantación cuenta con un presupuesto de nueve millones de euros. Los 11.216 alcorques que contarán este año con un árbol están distribuidos por los 21 distritos. Los que más alcorques vacíos tienen son Villa de Vallecas (1.655), Puente de Vallecas (1.318), Fuencarral-El Pardo (880), Ciudad Lineal (828) y San Blas-Canillejas (813).
Le siguen Hortaleza (588), Salamanca (504), Chamartín (483), Vicálvaro (467), Centro (455), Villaverde (409), Moratalaz (381), Arganzuela (359), Carabanchel (330), Chamberí (320), Usera (300), Latina (289), Moncloa-Aravaca (285), Barajas (194), Retiro (183) y Tetuán (175).
Las labores de plantación se abordarán durante todo este año, coincidiendo con las condiciones climáticas y fisiológicas más adecuadas para aumentar al máximo la probabilidad de éxito del arraigo de la planta. Las labores básicas se determinarán en función del alcorque.
De este modo, habrá escenarios sobre los que habrá que adecuar el hueco previamente a la plantación, porque haya que eliminar un tocón o reparar los sistemas de riego y aireación, por ejemplo. Las cinco especies con mayor número de ejemplares que se van a plantar son Celtis australis (1.242 ejemplares), Sophora japónica (990), Acer X freemanii (715), Melia Azedarach (671) y Platanus x hybrida (636).
El Ayuntamiento de Madrid ha asumido el reto de alcanzar el ‘cero técnico’, que ningún alcorque con posibilidad de albergar un árbol esté por más tiempo vacío y lograr lo que ninguna corporación había conseguido anteriormente.
El Consistorio seguirá reforzando la política ambiental del arbolado en una ciudad que ha sido reconocida durante dos años consecutivos (2019 y 2020) como Tree City of the World, por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y Arbor Day Foundation (Fundación Día del Árbol).
Madrid es una de las ciudades del mundo más arboladas. El patrimonio arbóreo en conservación municipal cuenta con 1,74 millones de ejemplares de más de 500 especies distintas. Todos ellos se sitúan en unas 5.000 calles arboladas y más de 6.000 hectáreas de zonas verdes.