El 'glamping', una combinación de 'glamour' y camping, introduce una forma de turismo que ofrece contacto con la naturaleza y comodidad. En Madrid, el camping Monte Holiday ofrece cabañas en árboles y 'bungalows' ecológicos.
Irse de vacaciones a una cabaña en un árbol es una de las posibilidades de ocio para este agosto en Madrid. El camping es un tipo de turismo que ha evolucionado mucho en los últimos años, hasta dar lugar a una forma de alojamiento que se conoce con el término 'glamping', una combinación de contacto directo con la naturaleza y la comodidad.
Según explica el responsable del camping Monte Holiday y vocal de la Federación Española de Campings, Antonio Gonzalo, la mezcla de glamour y campings empezó hace dos décadas en el Reino Unido y luego se expandió al resto de Europa. "Donde más se ha desarrollado es en Holanda y Francia y, desde hace unos diez, años ha llegado a España con bastante fuerza. Es el segmento del camping que más crece dentro de lo que son las nuevas tendencias de turismo".
En Monte Holiday, situado en Gargantilla de Lozoya, en plena Sierra Norte de Madrid, ofrecen cabañas en los árboles y 'bungalows ecolodges'. "Las cabañas están situadas a cuatro u ocho metros de altura, con vistas fantásticas a la naturaleza, mientras que los ecolodges lo que ofrecen es naturaleza en estado puro, el paisaje entra dentro de alojamiento con lo que la experiencia en la naturaleza, que es muy bonita", asegura Gonzalo.
Nuevo perfil de clientes
El perfil del campista ha evolucionado mucho en los últimos años, también fruto de la gran cantidad de ofertas que han surgido. "El mundo del camping ofrece nuevas posibilidades de alojamiento, que nos han permitido captar a nuevos clientes que no quieren cargar con la tienda y las sillas y prefieren un alojamiento con todas las comodidades de un hotel, muchas veces de alto standing, pero al mismo tiempo quieren contacto con la naturaleza", explica el responsable de Monte Holiday.
Según los datos de la Federación Española de Camping, en España sólo el 3% de la población hace camping, mientras en Holanda llega al 30%. "El recorrido que tiene España en relación a esta nueva oferta alojativa es brutal".
La pandemia también ha cambiado la forma de plantearnos el ocio. "Después del confinamiento y. las restricciones por la COVID19, la gente descubrió lo que es alojarse en la naturaleza y muchos clientes que eran tradicionalmente hoteleros ahora nos eligen no sólo por el tipo de alojamiento, sino por las actividades sociales que genera un camping. La vida aquí es mucho más libre".
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