El área de Coordinación Territorial, Transparencia y Participación Ciudadana ha firmado un decreto gracias al cual a partir del próximo lunes los mercadillos de los distritos podrán reabrir, limitando los puestos al 25%.
El decreto del área de Coordinación que dirige Silvia Saavedra permitirá levantar la suspensión de la celebración de mercadillos en los distritos adoptada debido al estado de alarma por la pandemia, aunque con medidas de seguridad.
Así, los mercadillos que se celebran en 16 de los 21 los distritos podrán volver a instalar sus puestos a partir del día 25 de mayo, pero reduciéndolos un 25%. Además se establece la prioridad a los productos alimentarios y de primera necesidad -la ropa y complementos probablemente no volverán-, y se controlará el aforo a un tercio de lo habitual. Habrá señalización de itinerarios de entrada y salida, distancias de seguridad y cartelería informativa.
Todos los puestos deben estar higienizados, no habrá manipulación directa de alimentos, y se instalarán a una distancia mínima de dos metros de lateral y seis cuando estén enfrentados a otro.
Silvia Saavedra señaló que esta medida implican "una firme apuesta por el comercio de venta ambulante, que es parte medular de la actividad económica de la ciudad, y por otro, la voluntad de que su reapertura se haga con máximas garantías de seguridad y salud para los madrileños".
Mercadillos en 16 distritos de Madrid
En Madrid hay una veintena de mercadillos repartidos por 16 de los 21 distritos, algunos fijos, pero la mayoría de carácter semanal. Hortaleza por ejemplo tiene dos, en la calle de Alcorisa los martes y los domingos en la carretera de la Estación, al igual que Ciudad Lineal (en la calle Gandhi y en Santa Genoveva), mientras en Barajas se celebra en la calle de Ayerbe los sábados. En Salamanca hay uno fijo en la avenida de Felipe II, pero de artesanía, por lo que la medida podría no afectarle.
En la Comunidad de Madrid se estima que el parón de la actividad de los mercadillos ha afectado a 5.000 vendedores, la mayoría autónomos, que pese a ser un sector esencial como la alimentación, han visto paralizada su actividad. También reclamaron la suspensión de las tasas de ocupación de la vía pública y ayudas para el sector.