Un total de 41.766 personas usaban la estación de Metro de Madrid de Gran Vía el pasado viernes, día de su reapertura tras más de 1.000 días cerrada, y unas 6.000 entraron únicamente para visitarla sin hacer posteriormente ningún viaje.
Así lo han detallado fuentes del suburbano, que han destacado, además, que hubo una demanda del 81,24% respecto a las cifras prepandemia, un "dato significativo" siendo un viernes del mes de julio.
La estación de Gran Vía abría el pasado viernes generando gran expectación, tras permanecer clausurada por obras desde agosto de 2018, unos trabajos que se tuvieron que prolongar en el tiempo al hallarse restos arqueológicos de la anterior estación.
Este patrimonio ha sido recuperado por el suburbano, que ha incluido en la estación un espacio museístico en el que se pueden observar, entre otros, restos del antiguo templete que coronaba la parada cuando esta abrió en 1919 como parte de la primera línea de la red.
Para recuperar esta historia, se ha construido una réplica del templete con materiales procedentes de O Porriño, localidad de origen del arquitecto Antonio Palacios, que cuenta en su cima con dos leones de granito que vuelven a posar su mirada sobre esta arteria de la capital.
Tras las obras, Gran Vía se ha convertido en una "estación 4.0", con tornos de nueva generación, con control de aforo y máquinas expendedoras de títulos de transporte táctiles. Asimismo, incorpora un paso que la conecta con la estación de Sol y la red de Cercanías Madrid.