Pedro Sánchez ha anunciado una inversión de 40 millones de euros para promover el uso de la bicicleta en las ciudades, la mitad a bicicletas públicas y la otra, a bicicletas con asistencia eléctrica para particulares y empresas de reparto.
Así lo ha avanzado en una rueda de prensa desde el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, al mando de Óscar Puente, coincidiendo con la presentación de una campaña publicitaria para promover el transporte público.
"Me gustaría pedirles a los alcaldes que no se dejen llevar por el oscurantismo anticlimático de algunos partidos políticos que desmantelan carriles bicis y zonas peatonales, incluso cuando ya han llegado las ayudas de Europa y han sido pagadas precisamente por los fondos 'Next Generation'", ha defendido.
Sánchez ha destacado que el Gobierno ha invertido cerca de 2.000 millones de euros en transporte en los dos últimos años, bonificado los billetes y lanzado el programa Verano Joven, junto con la gratuidad de los Cercanías y Media Distancia, medidas que considera que "han ayudado a los ciudadanos a llegar mejor a fin de mes".
"El metro, el autobús, el tren y, también, las bicicletas son parte de la vida cotidiana de millones de españoles y españolas, y desde las administraciones públicas lo que debemos hacer es mejorar la calidad y el acceso a esos medios", ha defendido el presidente.
"Yo sé que eres inteligente. En transporte público se mueve mi gente. Te libras de atascos y sale barato. 600 euros te ahorras al año. Y a nuestro planeta le quitas el daño. Viajar en bus no es bajarse al barro. Tardas la mitad que en tu propio carro", dice la canción del 'spot'.
En el anuncio se ve a una persona en un Lamborghini en medio de un atasco, que acaba bajándose del coche para ir a una estación de tren, en línea con las palabras que pronunció Sánchez hace una semana: "Más transporte público y menos Lamborghinis".
Bicicletas públicas
Sánchez ha concretado que la primera línea de ayudas de 20 millones de euros irá destinada a los sistemas de bicicletas públicas que ya están en marcha en distintas ciudades, así como para extenderlo a otras ciudades.
En concreto, 10 de esos 20 millones se utilizarán para abaratar las tarifas de los sistemas ya existentes, como el Bicimad de Madrid o el Bicing de Barcelona, y los otros 10 millones para que los ayuntamientos de otras ciudades los implemementen.
Por su parte, la otra línea de 20 millones se utilizará para comprar bicicletas con asistencia eléctrica en un programa del que podrán beneficiarse tanto los particulares como también las empresas ciclologísticas de reparto de mercancías.