El área de Obras y Equipamientos del Ayuntamiento de Madrid, con Paloma García Romero al frente, sigue estudiando posibles soluciones para el Scalextric de Pacífico, el último de Madrid. Lo que está en marcha son los estudios necesarios antes de poder redactar el proyecto, por lo que aún no pueden ponerse plazos encima de la mesa, han indicado fuentes municipales.
Y plazos más rápidos es, por contra, lo que demandan desde la Asociación de Vecinos afectados por el Puente de Pacífico, que lamentan que la actuación en el Scalextric "no sea prioritaria" para el Gobierno municipal, aunque, en 2006, la Junta de Retiro aprobara por unanimidad la supresión del puente sobre la calle Pedro Bosch, "por los daños medioambientales que genera y los problemas de ruido y contaminación".
La eliminación del puente cobró impulso en la legislatura pasada, con Ahora Madrid al frente, cuando se pusieron sobre la mesa hasta dos proyectos, dibujados para el eje por el Colegio de Ingenieros de Caminos para que fueran votados por la ciudadanía en la plataforma Decide Madrid.
La actual Junta de Retiro, presidida por Santiago Saura (Cs), decidió seguir adelante con el proyecto de desmantelamiento, pero hizo decaer también las propuestas del Colegio. En el presupuesto vigente, el de 2020, se destinó una partida de 150.000 euros la redacción del proyecto y de los trabajos en el eje circundante.
Concurso Internacional, con el Colegio de Caminos
Un concurso internacional de la mano del Colegio de Ingenieros de Caminos de Madrid serviría para que el entonces Ayuntamiento, presidido por Manuela Carmena, aportara soluciones técnicas a dos escenarios que ponían sobre la mesa sobre el infrautilizado puente de Pedro Bosch: la eliminación de parte de la infraestructura, al norte de la calle Ciudad de Barcelona, y dando otro tratamiento a lo que restaría en la parte sur, o el mantenimiento del puente, pero cambiando su uso.
El proyecto incluía la conexión, a través de una vía verde, entre el parque del Retiro y el Tierno Galván, en el distrito de Arganzuela.
Desde 1972
Este Scalextric se levantó en Madrid, en 1972. Entonces era una solución idónea para un ámbito de la ciudad que tenía un carácter industrial del que ahora carece. Se planteó para 40.000 conductores al día.
Cuarenta y ocho años después, la ciudad ha cambiado mucho, empezando por el predominio del uso residencial, una densidad de población en el tramo de Doctor Esquerdo que requiere soluciones distintas. Ahí es donde nació la propuesta de eje cívico entre los distritos de Retiro y Arganzuela.
Ahora, hay que dar soluciones a colegios como el Plácido Domingo, en Arganzuela, o el IES Forges, a los que habría que sumar las 2.000 viviendas en el barrio de Atocha, con entre 4.000 y 5.000 nuevos vecinos.
El Scalextric de Pedro Bosch fue objeto de atención durante el pasado mandato, pero ya contaba a sus espaldas con una reflexión que data de 2006, cuando la Junta de Retiro aprobó una resolución pidiendo el desmontaje del puente. Entonces se redactó un informe de viabilidad, que determinaba que se podía desmontar el tramo del puente entre la zona norte de Ciudad de Barcelona, mientras se mantenía el ámbito a partir de esta avenida, pero al sur.
Durante el mandato pasado, se pusieron en marcha acciones de ensayo en el uso alternativo del espacio público en beneficio de la movilidad ciclista y peatonal. A destacar la ampliación de aceras para solucionar los problemas de accesibilidad.