El Ayuntamiento de Madrid sumará el uso cultural y educativo al deportivo, para que "definitivamente entre en funcionamiento" y plantea la cubrición como "una posibilidad y no como una obligación". Desde la aprobación inicial del Plan Especial, se han registrado una decena de alegaciones, que han sido desestimadas.
El Consistorio de la capital sumará el uso cultural y educativo al deportivo a las instalaciones del Beti Jai, para que, "definitivamente, entre en funcionamiento" y plantea la cubrición como "una posibilidad y no como una obligación", según se ha aprobado definitivamente en el Pleno extraordinario en Cibeles de julio, con los votos a favor de PP y Vox y el rechazo de Más Madrid y PSOE.
Con el Plan Especial se pretenden ampliar los usos dotacionales, para atender las necesidades ciudadanas y recuperar un elemento arquitectónico singular, ha explicado el área de Urbanismo, con Borja Carabante al frente.
El objetivo pasa por "incorporar el uso del equipamiento en sus categorías de cultural y educativo como uso alternativo, en coexistencia con el actual deportivo, de forma que se disponga de condiciones, dentro del uso dotacional, que faciliten y hagan posible la puesta en valor y el adecuado funcionamiento del conjunto del edificio", ha trasladado el área.
Más posibilidades de uso
Estos usos alternativos propuestos por el Plan Especial "aumentan las posibilidades de uso que brinda el edificio, poniéndolo en valor y permitiendo su disfrute ciudadano", consiguiendo que "definitivamente entre en funcionamiento" al ofrecer mayor flexibilidad, sin perjuicio de la protección de las características arquitectónicas del frontón.
La modificación permitirá, además, la sostenibilidad física y económica del edificio, tras evitar su ruina mediante las obras de consolidación acometidas entre 2015 y 2019, subsanando los daños causados por sus alteraciones para adaptarlo a los usos diversos albergados y el largo periodo de inactividad y abandono en el que se encontraba desde 1989.
Una decena de alegaciones
La Junta de Gobierno de Madrid acordó, el 20 de octubre de 2022, la aprobación inicial del Plan Especial, así como la apertura del trámite de información pública por el plazo de un mes. Se registraron una decena de escritos de alegaciones de ocho alegantes, concretamente Madrid, Ciudadanía y Patrimonio, la Plataforma Salvemos el Beti Jai, la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM), PSOE, Más Madrid y tres particulares.
Fundamentalmente, cuestionaban la consideración como patio de la cancha de juego y su cubrimiento, así como sus implicaciones respecto a los criterios de intervención de la declaración BIC del frontón, el incremento de edificabilidad que comporta o la alteración de la envolvente.
Se propuso la desestimación de las alegaciones, por cuanto la consideración del espacio libre como patio ha sido ratificado por la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), en sentencia de 30 de noviembre de 2018.
Un polémico cubrimiento
Respecto al incremento de edificabilidad denunciado por los alegantes, asociado al cubrimiento del patio, el Plan Especial presentado por el área de Urbanismo plantea la cubrición "como una posibilidad y no como una obligación", señalando el artículo 3 de sus normas urbanísticas, "que se podrá autorizar el cubrimiento de la cancha de juego con las condiciones previstas en ellas para que la cubrición no compute a efectos de edificabilidad".
"El Plan Especial no autoriza ningún proyecto de obras ni de usos concretos, solamente flexibiliza el régimen de usos dotacionales permitidos en el edificio y define unas condiciones de volumen que posibilitarían, en su caso, una cubrición", han aclarado.
En todo caso, sería necesaria la tramitación de un Plan Especial previo para autorizar las obras y usos que finalmente se propongan, en base a un proyecto concreto para el Beti Jai.
Alegaciones de la oposición
Más Madrid solicitó justificación sobre cómo y por qué se incluye el equipamiento cultural/educativo como uso alternativo y no como complementario, considerando, además, que debería acotarse la zona en la que debería ubicarse ese uso. También cuestionaban la consideración de la cancha de juego como patio y su cubrimiento.
El concejal de Más Madrid, Alvaro Fernández Heredia, manifestaba que "tiene sentido flexibilizar los usos para que el edificio tenga vida y una mejor conservación". Después de recordar los "esfuerzos del gobierno de Manuela Carmena para recuperar un edificio en ruinas". Sin embargo, el edil ha reprochado al PP que no informen del programa de actividades posible del Beti Jai y en cuanto a cubrir la cancha, el concejal de Más Madrid ha declarado que se "equivocaron" en el pasado, porque puede influir en las condiciones BIC.
También ha indicado que la memoria económica dice que ese patio se puede abrir a "eventos de grandes empresas y catering" y "eso no es un uso cultural", sino que es "un contenedor para las empresas de esta ciudad".
El PSOE teme "una privatización"
El concejal socialista Antonio Giraldo se ha preguntado al Gobierno qué finalidad prevé para el Beti Jai y desde el PSOE han mostrado su temor a que el cerramiento "pueda ser el pistoletazo de salida para privatizarlo", transformándolo en un "mero activo económico, como Canalejas".
El frontón Beti-Jai, en la calle del Marqués de Riscal, 7, del distrito de Chamberí, cuenta con 3.609 metros cuadrados de superficie y una construida de 4.579. La parcela ocupa el centro de la manzana, rodeada de edificios de viviendas de seis a ocho plantas.