Un total de 131 ucranianos llegan este lunes al polideportivo de Daoiz y Velarde, un espacio que el Ayuntamiento de Madrid ha cedido al Gobierno de España como lugar de tránsito para descansar de los desplazados. Sin embargo, los vecinos de Retiro piden que se busque otra alternativa más digna, que no afecte los contados servicios públicos del distrito.
Así lo ha explicado la vicealcaldesa de la capital, Begoña Villacís, después de visitar el centro deportivo con el concejal del distrito de Retiro, Santiago Saura, y representantes de la Cruz Roja. El espacio podrá acoger hasta 240 personas y podrían ampliarse las plazas, "si fuese necesario".
"Madrid responde con camas, comida, mantas o entretenimiento. Responde a estas personas que están pasando los momentos más difíciles, con hospitalidad, siendo acogedores. Aquí les atenderemos, aunque sean unas horas, pero que sean de tranquilidad y la recuerden como horas de paz", ha asegurado Villacís.
En esta línea, la vicealcaldesa ha reiterado que las plazas que hay en la capital "son insuficientes" y que el Consistorio ya ha pedido una ampliación al Gobierno central, porque "se esperan 13 millones de refugiados vagando en las calles".
"Hemos atendido a 531 familias, la mayor parte han dormido en el centro de acogida Las Caracolas. Pero, las plazas que tenemos a día de hoy son insuficientes. Hemos pedido una reunión de coordinación con el Ejecutivo más allá que Delegación de Gobierno", ha indicado Villacís.
La vicealcaldesa ha resaltado la "respuesta" que está dando Madrid a los ucranianos. Así, ha recordado que el Gobierno central les pidió hace una semana este centro deportivo y se aprobó el pasado jueves en la Junta de Gobierno. "Necesitamos que haya comunicación, que despierte de la realidad y deje de estar atascado en las batallas internas", ha insistido.
Quejas por la cesión del espacio
Por su parte, los vecinos del distrito de Retiro están recogiendo firmas en la plataforma 'change.org' para que el Ayuntamiento de la capital no acoja a los ucranianos en el centro deportivo Daoiz y Velarde, ya que las instalaciones "no se encuentran preparadas para hacer una acogida de ese tipo".
Así lo han explicado los vecinos en un manifiesto, donde han reiterado su "solidaridad y apoyo" a los ucranianos, porque "están sufriendo una crisis de máxima dureza". Sin embargo, han subrayado que su alojo, "aunque sea temporal, no cumple esas condiciones de respeto y dignidad".
"Adicionalmente, esta decisión cancela radicalmente una serie de actividades que están jugando un papel esencial en el desarrollo comunitario del barrio y que son pieza clave para intentar mitigar fragilidades sociales importantes que tiene nuestro territorio", han lamentado.
En este sentido, los manifestantes han señalado que gracias al polideportivo, "las personas mayores tienen un espacio para mejorar sus condiciones físicas, reforzar sus relaciones sociales y evitar situaciones de soledad no deseada".
Asimismo, han asegurado que hay "una nula infraestructura de instalaciones deportivas en los colegios públicos del barrio, que parcialmente se ve mitigada con los convenios de uso que el polideportivo hace de esos centros".
Exigen otra alternativa
"Ni estamos capacitados, ni somos los responsables de buscar soluciones dignas y razonables para el alojamiento del colectivo de refugiados. Aunque pensamos que pueden existir numerosas vías mucho mejores que la ahora adoptada, como instalaciones hoteleras u otros espacios públicos no usados actualmente", han resaltado.
En esta línea, los vecinos han exigido a los representantes y a las distintas administraciones públicas afectadas que, de "manera urgente", encuentren y pongan en marcha esas soluciones, con una visión de medio plazo dadas las "desafortunadas características" que tiene el conflicto ucraniano.
"Exigimos que se revoque de forma inmediata el cese de actividades del polideportivo anunciada y se vuelva a la normalidad operativa hasta que se encuentre una solución más adecuada", han pedido los usuarios del polideportivo.
Villacís pide disculpas y comprensión
La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, ha visitado este lunes el centro de Daoiz y Velarde para comprobar la adaptación del centro, donde los vecinos le han dado a conocer su oposición a esta decisión y han pedido que se acojan a los ucranianos en un hotel o en un espacio "mejor habilitado".
"El pasado viernes 26 se notificó el cierre inmediato del centro deportivo a todos las personas y asociaciones usuarias del centro. La decisión se tomó de forma repentina, unilateral y sin aportar ningún tipo de opción o alternativa", han explicado.
Villacís les ha pedido disculpas y ha asegurado que se les propondrá otras alternativas. "Esta es una causa superior, es una crisis humanitaria. Debemos dar solidaridad. Iremos valorando como encajar las actividades deportivas", ha indicado.