La Fundación de la Energía ha reactivado las ayudas del Plan Renove de Electrodomésticos de la Comunidad de Madrid, adaptado al nuevo etiquetado energético europeo. Estas ayudas están destinadas a la adquisición y sustitución de lavadoras, lavavajillas y frigoríficos por nuevos equipos de clase A, B o C.
Las solicitudes se podrán tramitar a partir del 21 de abril de 2021 y hasta el 31 de diciembre. El importe de las ayudas ascenderá a
150 euros en frigoríficos y frigoríficos combi; 110 euros, en lavavajillas y
70 euros, en lavadoras, no pudiendo superar el 25% del importe de la inversión subvencionable.
Para beneficiarse de las ayudas, es
necesario obtener un Bono a través de la
web del Plan Renove de Electrodomésticos, que podrán
canjear presencialmente en un establecimiento comercial adherido de la Comunidad de Madrid durante las 48 horas siguientes a su emisión.
Excepcionalmente,
también serán subvencionables aquellos electrodomésticos con antigua etiqueta A+++ puestos en el mercado hasta el 30 de octubre de 2020 y que no dispongan de nuevo etiquetado, pero que pueden seguir comercializándose por disponibilidad de
stock con la etiqueta antigua hasta el 30 de noviembre de 2021.
No se subvencionará ningún electrodoméstico con etiqueta A+++ vendido después del 30 de noviembre de 2021.Se subvencionará hasta
un máximo de un electrodoméstico por cada tipo (lavadoras, lavavajillas y frigoríficos/frigoríficos combi)
por persona física o jurídica, siempre que la inversión tenga como destino final la sustitución de un electrodoméstico ya existente y
su instalación se realice dentro de la Comunidad de Madrid.La presente edición del Plan Renove de Electrodomésticos está teniendo
mayor impacto sobre el comercio de proximidad que anteriores ediciones, generando actividad económica en la región y favoreciendo la competitividad en los diferentes niveles de la industria, desde los fabricantes a los pequeños comercios.
Esta
nueva clasificación energética de electrodomésticos, en vigor desde marzo de 2021, elimina de la escala las categorías A+, A++ y A+++, volviendo a la
escala inicial de la A -mayor eficiencia- a la G -menor eficiencia-, con el objetivo de simplificar el etiquetado energético y dejar espacio para los nuevos equipos más eficientes de última tecnología.