El cocido madrileño y el potaje de garbanzos, dos de los platos regionales que más se sirven cada semana en los menús de los hospitales de la región, según el 'II Observatorio Mediterránea de Alimentación al Paciente en Hospitales'.
De acuerdo con el informe, el 83% de los hospitales madrileños incluyen especialidades típicas de la región al menos una vez a la semana, cifra inferior a la media nacional, que se sitúa entre las dos y tres ocasiones.
Para la realización del informe, se han analizado los menús que ofrece semanalmente en 27 centros hospitalarios de 15 provincias españolas. En el caso de Madrid, se han centrado en los servicios de restauración del Hospital de Fuenlabrada, el Hospital de Torrejón, el Hospital Puerta de Hierro, el Hospital Infanta Leonor, el Hospital Severo Ochoa y el Hospital MD Anderson Cancer Center.
"Incluir en los menús platos regionales de calidad forma parte de nuestro compromiso por hacer que todos los pacientes de los hospitales en los que operamos se sientan como en casa. Al ser generalmente de la comunidad en la que ingresan, ofrecer especialidades de la tradición gastronómica del lugar nos ayuda a crear un vínculo especial con ellos y hacer más amena su estancia", ha destacado la directora de Nutrición y Dietética de Mediterránea, Rocío Royo.
En cuanto a la variedad, al ofrecer sólo un plato regional por semana, los hospitales madrileños se encuentran por debajo de la media del país, que es de entre dos y tres platos regionales distintos a la semana. El cocido madrileño es la especialidad regional más recurrente, ya que se ofrece en dos de cada tres centros hospitalarios de la provincia semanalmente, seguido del potaje de garbanzos.
Galicia es la comunidad autónoma en la que los hospitales ofrecen más veces recetas tradicionales a sus pacientes y profesionales, con una media de entre seis y siete veces a la semana; seguida de Asturias y Baleares (cinco veces), Murcia (entre tres y cuatro) y Canarias (tres).
"Contar con una buena alimentación es un pilar clave en la pronta y correcta recuperación de todo paciente, sin importar la patología que tenga. En ello, la tradición gastronómica española, y con ella la dieta mediterránea, son un buen modelo a seguir por la gran variedad de alimentos y nutrientes que ofrecen", ha destacado Royo, quien también advierte que "aunque no se esté ingresado en un hospital, tener una alimentación saludable es trascendental para todas las personas, de cara a prevenir enfermedades y estar sanos".