El área metropolitana de Madrid es uno de los principales consumidores de helados en España, con un 13,3%. El sector enfrenta retos por el aumento de costos, pero la demanda de helados saludables y artesanales está en crecimiento.
El área metropolitana de Madrid se consolida como una de las zonas de España en la que más helados se consume, según los datos de la Asociación de Empresarios Artesanos del sector de la Pastelería de Madrid (Asempas).
Según indica la asociación, las regiones con mayor consumo son Andalucía (22,3%), Levante (18,9%), área metropolitana de Madrid (13,3%) y el área metropolitana de Barcelona (10,2%). Las poblaciones de entre 200.000 y 500.000 habitantes presentan mayor intensidad de consumo, siendo las mujeres las mayores consumidoras (53,4%) frente al 46,6% de los hombres.
Con Italia, Alemania y España liderando el mercado, el consumo sigue estable y con perspectivas de crecimiento, aunque condicionado por una subida sostenida de costes que impacta especialmente al sector artesanal. En 2024, Italia se consolidó como el referente europeo en consumo de helado con más de 600 millones de raciones vendidas (26,4%), seguida por Alemania (25,1%) y España (20,6%). Además, el helado ya está presente en el 4% de las salidas fuera del hogar en el continente.
La demanda de helados más saludables, debido a restricciones dietéticas o problemas de salud y personalizados –vegetales, sin lactosa, bajos en azúcar o con sabores exóticos, como matcha o yuzu– está transformando la oferta del sector y abriendo nuevas oportunidades para toda la cadena de valor.

España fue el cuarto mayor productor de helado de la UE en 2024, con 378 millones de litros, según Eurostat. Entre junio de 2023 y mayo de 2024, se consumieron 140 millones de litros, una cifra prácticamente estable (-0,6%), según datos del informe del consumo del año 2024 del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). El consumo se concentra en verano, con un 50% del total en el tercer trimestre, y cae en invierno (7%).
Además, el consumo en el hogar se sitúa en 3,33 litros por persona al año, representando el 10,3% del total de derivados lácteos, en tercer lugar tras las leches fermentadas y los quesos. Los adultos independientes lideran el consumo, con casi cinco litros por persona al año.
Los supermercados concentran el 65% de las ventas de helado en España, seguidos de tiendas de descuento e hipermercados. Internet y la tienda tradicional, aunque con menor volumen, ofrecen los precios más elevados (hasta 7,70 euros/litro). El auge y la proliferación de heladerías y heladerías artesanales ha mejorado la accesibilidad al mercado del helado, el comercio minorista de las heladerías tradicionales sigue siendo la forma más común para que los consumidores compren helado.
Por su parte, el consumo extradoméstico (en la calle, establecimientos, en el trabajo, en centros docentes: colegios/institutos /universidades o casa de otros) alcanza 0,84 litros por persona, pero se ha reducido un 8% por la menor frecuencia de compra.
Innovación, calidad y precio
El precio del helado ha subido un 30% en tres años y en 2025 se espera un incremento adicional del 5% al 10%. En el sector artesanal, algunos productores recurren a ingredientes sustitutos o grasas alternativas para mantener la rentabilidad.
El helado artesanal, valorado por su frescura y calidad, gana terreno frente al industrial. Su contenido de aire (30-35%) influye directamente en la textura y conservación, y su elaboración diaria lo vincula con el concepto de producto fresco. Los sabores tradicionales –como turrón, vainilla y chocolate– siguen liderando el mercado, aunque crecen las preferencias por sabores frutales y tropicales –como mango, limón o maracuyá–, así como los sorbetes en zonas costeras y los helados veganos en entornos urbanos.
La Asociación Nacional de Heladeros (ANHCEA) prevé que 2025 será un año clave para el sector, marcado por "la innovación, la sostenibilidad y la adaptación a los gustos emergentes".