Hasta 18 placas Stolpersteine, en homenaje a vecinos deportados a campos nazis, se repartirán por el distrito Centro después de que este miércoles su concejal-presidente, José Fernández, eleve la propuesta al Pleno.
Los Stolpersteine son adoquines insertados en el suelo con una placa dorada allí donde vivieron estos vecinos y vecinas deportados a campos nazis. Madrid ya cuenta con cerca de una docena de adoquines Stolpersteine repartidos entre Chamberí, Carabanchel, Moncloa, Tetuán, Latina, Arganzuela y Centro.
Los 'Stolpersteine' (piedra que te hace tropezar, en alemán) son una creación del artista alemán Günter Demnig. El primero se instaló, en 1997, en el distrito berlinés de Kreuzberg. El propio Demnig instaló los ocho primeros de Madrid en la legislatura pasada como señal de respeto.
El artista alemán ha fabricado e instalado más de 65.000 de estos pequeños memoriales en 23 países. Se pueden encontrar adoquines Stolpersteine en Bruselas, Hannover, Burdeos, Roma, Viena, Nuremberg o Praga.
Las primeras piedras Stolpersteine llegadas a España lo hicieron en Cataluña, concretamente en el municipio barcelonés de Navas, donde fueron instaladas en septiembre de 2015.
'Aquí vivió'
Los adoquines de esta iniciativa de memoria son bloques de cemento de 96mm x 96mm x 100mm, en los que se inserta en una de sus caras cuadradas una placa de bronce con el nombre de la persona a recordar, la fecha de su nacimiento, de la deportación, la fecha de su reclusión y la de su asesinato.
El texto cincelado suele arrancar con las palabras 'Aquí vivió', ya que lo habitual es instalar estas piedras en el suelo delante de la puerta de la que fue vivienda de la víctima, nunca en la pared.