La Casa de México en España exhibe "por tercer año consecutivo", el 'Altar de Muertos', una ofrenda que se realiza cada año en el país de origen tratando de "festejar con vida la muerte", y que "este año va dedicado a todas las personas que fallecieron a causa del Covid-19".
La directora de Cultura de la Casa de México en España, Susana Pliego, ha explicado que "todos los altares de muertos llevan fotografías de las personas a las que se dedica el altar o la ofrenda y este año decidieron hacerlo para las víctimas del Covid".
Tal y como ha explicado Pliego, lo que hacen es recordar a sus difuntos "con estas ofrendas en las que se ponen ciertos elementos que recuerdan a los cuatro elementos: semillas, de tierra; papel picado, por el aire; se pone agua y también fuego, a través de velas".
Este año el altar une "el trabajo de tres artesanos". Por un lado, estarían las figuras de carrizo realizadas por los artesanos de Tepoztlán, por otro, "más de 6.000 flores que se han utilizado para este diseño como remembranza a los textiles de México" y, por último, "un artesano que realiza el papel picado".
En cuanto a los tonos de las flores,"cada altar es de colores diferentes y el único que está presente en todas las ofrendas es el naraja, que es el de la flor de cempasúchil con la que se hace un camino para guiar a los muertos al altar".
El Día de Muertos, tal y como ha explicado Pliego, es un claro ejemplo de la fusión de dos culturas: la mesoamericana y la tradición católica llevada a México por los españoles en el siglo XVI, por lo que "comparte tanto raíces prehispánicas, como occidentales",
"Es este encuentro de vivos y muertos que es único para nuestra cultura, de hecho la fiesta de El Día de Muertos es reconocido internacionalmente y, en 2003, fue declarado Patrimonio Mundial Inmaterial por la UNESCO", ha añadido Pliego.
Medidas COVID-19
La directora de Cultura ha celebrado que, a pesar de las restricciones provocadas por la pandemia, puedan "permanecer abiertos y con dos exposiciones" en marcha y ha asegurado que la Casa de México "se puede visitar con toda seguridad, siempre manteniendo los aforos de la Comunidad de Madrid".
"Hicimos un sistema para que la gente reserve y puedan entrar de seis en seis, tenemos que poner gel hidroalcólico, toma de temperatura al entrar y la gente con mascarila hasta en las fotos, por lo que es un año de Día de Muertos en el que a todos nos ha cambiado la vida", ha apuntado.
Además en estos días tan marcados para la Casa de México, han sufrido el confinamiento de la zona básica de salud donde se sitúan, por lo que, desde el museo, han "informado a los visitantes de que deben consultar el BOCM para conocer las restricciones".
A pesar de que ha habido personas que han tenido que cancelar su reserva, la Casa de México ha asegurado que no se ha visto muy afectada. "Nosotros somos una casa muy enfocada al barrio de Chamberí que es donde estamos ubicados, y los vecinos han aprovechado también que algunas personas que venían de otras áreas han cancelado y ellos están felices de tener espacio", ha concluido.