Una cacerolada protesta este jueves ante la Asamblea de Madrid, por el "caos" en la tramitación y gestión de las becas comedor, tras la decisión del Gobierno regional de conceder estas ayudas a todas las familias solitantes este curso.
La protesta, convocada por la Plataforma de Vallecas por la Escuela Pública con el apoyo de la Federación de Enseñanza de CC.OO, ha tenido una primera convocatoria a las 12.30 horas y se repetirá a las 17.00 horas. Se invita a acudir con cacerolas, silbato o tambores, para hacerse oír en la sesión plenaria.
Los convocantes reclaman la derogación del acuerdo del Consejo de Gobierno, del pasado 17 de mayo, por el que se aprobaron las normas reguladoras del nuevo procedimiento de concesión directa de becas comedor; un proceso extraordinario para quienes no pudieron solicitar la pasada primavera, con condiciones similares al aplicado en la última década; la creación de una Mesa de Comedor con agentes sociales implicados y familias, para analizar lo ocurrido, proponer mejoras y construir desde la comunidad educativa un sistema de becas que garantice el acceso al comedor a todo el alumnado, teniendo como horizonte la universalidad (gratuidad) del servicio de comedor.
Los organizadores, recuerdan, además, que este año no tendrá lugar el convenio entre la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de la capital "para completar las becas comedor a familias especialmente vulnerables, desde los Servicios Sociales".
El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha aprobado este miércoles modificar las normas de concesión de las becas de comedor de este curso 2023/24 y que todas las familias que hayan pedido la ayuda directa este año, más de 107.000 dentro del plazo de admisión de solicitudes, sean beneficiarias durante todo el periodo lectivo.
La decisión, comunicada por el consejero de Educación, Ciencia y Universidades, Emilio Viciana, se produce tras las incidencias derivadas del cambio de sistema de tramitación de las becas que ha ocasionado que muchas solicitudes presentasen defectos de forma, incluso después de ampliarse el período de subsanación y habilitarse mecanismos de ayuda.
Viciana explicó que la Comunidad de Madrid, cuando detectó "un cierto retraso en la tramitación de las becas, así como incidencias, enseguida se ha puesto del lado de las familias" y, desde el principio, anunció que "se sufragaban los costes de la beca comedor de todas aquellas familias" que la hubieran solicitado y que estuvieran pendientes de resolución".
"A lo largo de este tiempo, se han detectado algunos defectos de subsanación de carácter reiterativo, que han motivado la necesidad de adoptar este acuerdo", ha señalado a continuación.
Más de 107.000 peticiones
Así, el Gobierno que preside Isabel Díaz Ayuso ha decidido que las más de 107.000 peticiones que se registraron dentro del plazo de admisión, que terminó el pasado 7 de julio, reciban este año los importes de la modalidad solicitada, con efecto retroactivo al comienzo del curso "para evitar que las incidencias formales puedan causar perjuicios a cualquier familia que necesite que sus hijos hagan uso de este servicio".
"Lo que hacemos es garantizar que una cuestión tan delicada como es la alimentación de los menores pueda verse garantizado y desde luego nos ponemos del lado de las familias y les ayudamos a que puedan disfrutar de esta beca con toda normalidad", ha subrayado el titular de Educación.
Además, ha avanzado que ya están trabajando en un sistema más simplificado y sencillo para las familias de cara al próximo curso 2024/25.
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