La Policía Nacional ha cargado contra los manifestantes más radicales, después de que han empezado a patear y volcar las vallas que protegían la sede del PSOE en Ferraz y a lanzar botellas de cristal y petardos a los agentes.
En esta ocasión, la Policía Nacional ha comenzado a dispersar a los asistentes más radicales con cargas cerca de la medianoche, el día que más se ha dilatado la protesta, mientras los furgones policiales comenzaban a discurrir por las calles de Marqués de Urquijo, Princesa, y otras aledañas a Ferraz, por donde se han dispersado corriendo los asistentes.
Esta jornada ha reunido a 4.000 asistentes, el doble que la jornada de ayer cuando se produjeron 15 detenciones, tras altercados similares con radicales que se concentraban en la primera fila lanzando objetos a la Policía y a la prensa.
Redes sociales y dirigentes de Vox
Como en las anteriores concentraciones, la gente ha comenzado a llegar sobre las 19.30 horas, después de una nueva convocatoria en redes sociales apoyada, entre otros, por dirigentes de Vox, que animan a la movilización permanente en las calles por los acuerdos de la investidura.
La decimocuarta tarde de protestas en Ferraz ha vuelvo a contar con asistentes de todas las edades y mucha presencia de jóvenes, portando banderas de España y cánticos contra el presidente del Gobierno, en un ambiente que, de momento, es pacífico.
Sobre las 19.30 horas, la Policía Nacional ha comenzado a vallar y cortar el tráfico en Ferraz ante los asistentes que comenzaban a llegar, como viene siendo habitual, a la intersección con Marqués de Urquijo, que ha ido llenando de personas, aunque a un ritmo menor que en otras ocasiones.
Además de las habituales banderas españolas, también se ha visto una enseña de la Comunidad de Madrid, alguna franquista y la Estelada con un tachón. Entre los cánticos e insultos, se han escuchado los habituales contra Sánchez ('No es un presidente, es un delincuente'), Puigdemont, el ministro Fernando Grande-Marlaska, y otros como 'No somos ultra, somos españoles' o 'No es una sede es un puticlub', además de numerosos ataques contra los medios de comunicación, tachándolos de 'prensa española manipuladora'.
También se han oído gritos contra la Policía Nacional –'Está Policía defiende la amnistía'–, el Rey Felipe VI, a quien acusan de traidor y masón, y le reclaman en carteles "que se aleje del comunismo", o el Partido Popular ('Donde están, no se ven, los niñatos del PP'). En un momento también han exclamado conocer la autoría del atentado terrorista del 11 de marzo de 2004 ('¿Qué pasó el 11-M') y se han lanzando proclamas contra la Carta Magna ('La Constitución hunde la nación').
En la primera fila de la concentración, se han ido colocando integrantes del partido de extrema derecha Democracia Nacional, con carteles de 'Cataluña es España'. Por detrás, también había un grupo de personas enarbolando banderas de 'Revuelta', la marca juvenil que apoya Vox.
A las 21.40 horas, la situación se ha tensado con el encendido de dos bengalas entre los asistentes y los antidisturbios se han colocado el casco protector.
Justo en esos minutos, también han empezado a arder varias esteladas y se ha iniciado el lanzamiento de latas y objetos a los agentes, a la vez que han comenzado a pedir que abandonaran la zona o les obligarían intervenir.