El restaurante Villena propone un viaje gastronómico desde la historia a la vanguardia, en el centro de Segovia

Segovia es una ciudad que enamora, rica en historia y tradiciones, con una gastronomía igualmente destacada. Su centro histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, alberga monumentos emblemáticos –el acueducto romano, el Alcázar y la Catedral– y la gastronomía segoviana es conocida internacionalmente.

El restaurante Villena se encuentra situado en el casco histórico de Segovia, en un antiguo convento capuchino del siglo XVII conocido como las Oblatas, por haber sido las monjas de esa orden las que lo habitaron hasta 1996. Fueron Don Antonio de Contreras y su mujer Doña María de Amézqueta autores del proyecto original que constaba de tres edificios, su propia residencia, el convento de los laboriosos Hermanos Menores Capuchinos y la iglesia sobre cuya fachada, flanqueando a San Buenaventura, aún permanecen los escudos nobiliarios de ambos cónyuges. En el siglo XIX, con la desamortización de Mendizábal, fueron expulsados los monjes y dedicado el convento a uso militar, hasta que, en 1929, se cedió a las religiosas.

En 2014, la iglesia se convirtió en el restaurante gastronómico Villena –que era como se llamaba el templo–. Cuenta con un espacio único y sobrio, una sala luminosa y elegante bajo la bóveda de su gran nave y dos discretos reservados en las capillas laterales.

Buen hacer a los fogones

Villena es un espacio singular, con una propuesta de cocina de vanguardia en la que se apuesta por el sabor de los productos locales tradicionales. Al frente de sus fogones ha estado durante varios años el chef Rubén Arranz, quien comenzó en el Restaurante José María de Segovia, se consolidó el Hotel Ritz de Madrid, y despues pasó por el Hotel Ritz de Londres, en el Château Les Crayères (Reims), el Kabuki Wellington y el Relais & Châteaux Orfila de Madrid.

Su trayectoria dio un giro al incorporarse al Restaurante Villena, en el que consiguió la Estrella Michelín, uno de los galardones más considerados en el mundo de la gastronomía, y que le llevaron a una reconocida y merecida fama a través de sus creaciones en los fogones.

En la actualidad, es el chef Rodrigo Aranguren Gallego quien mantiene alto el estandarte del restaurante, que cuenta con dos propuestas: el menú Esencia –70 euros pax– y el Gran Menú –120 euros pax–.